El consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Gortázar, pone la entidad «a disposición del Gobierno en funciones para colaborar en lo que corresponda a su responsabilidad». En la presentación de resultados del primer semestre del año, el directivo reconoce que «la falta de gobierno no es una buena noticia», pero está convencido de que los políticos «trabajarán para poner remedio a esa situación» en las próximas semanas.
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En todo caso, Gortázar no ha querido valorar que se pueda terminar en una nueva convocatoria electoral e insistió en que confía en un acuerdo, que considera que es «su deber», aunque no haya salido «en la primera oportunidad».
El consejero delegado del banco hizo estas declaraciones tras anunciar que el Grupo CaixaBank obtuvo en el primer semestre de 2019 un beneficio atribuido de 622 millones, un 52,1% menos que el mismo periodo del año anterior.
La entidad aseguró en la presentación de las cuentas de enero a junio que el resultado del grupo se ve impactado esencialmente por el acuerdo laboral alcanzado en el segundo trimestre, que ha supuesto un gasto de 978 millones de euros (685 millones de euros netos) y que permitirá 2.023 extinciones indemnizadas de adhesión voluntaria.
Sin este impacto, el resultado del semestre alcanzaría los 1.307 millones, creciendo 0,7%. El resultado del negocio bancario y seguros se sitúa en 295 millones de euros, un 21,4% más excluyendo el efecto del acuerdo laboral.
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Sobre la posibilidades de nuevos despidos de personal, Gortazar no prevé que se repita algo similar de 2019 a 2021. «En un entorno difícil tenemos que seguir buscando ahorros y nuevas vías de ingresos y confío en que más allá de 2011 tampoco creo que lo hagamos. Del resto del sector, las informaciones van en la línea de nuevos ajustes, pero nosotros nos hemos adelantado», destacó.
Ante la posibilidad de fusiones, el primer ejecutivo de la entidad que preside Jordi Gual también considera que se pueden producir nuevos casos en el sector, aunque en estas operaciones asegura que no figurará CaixaBank .
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Sobre nuevas vías de rentabilidad, el consejero delegado asegura que no quieren cargar con intereses negativos para los ahorrados, sino gracias a otras vías de negocio.
La entidad supera, por primera vez, los 600.000 millones en volumen de negocio (4,9%) gracias a los buenos resultados comerciales y los recursos crecen hasta los 380.864 millones de euros (6,2%, en 2019). Asimismo, el crédito a la clientela bruto se sitúa en 230.867 millones de euros (2,7% más que en el año) y la cartera sana aumenta un 3,3%.
El mercado inmobiliario está teniendo una evolución que hay que vigilar, pero Gortázar no ve un riesgo de sobrecalentamiento. Igualmente confía en que no se prolongue de forma indefinida la política de tipos bajos del Banco Central Europeo.
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La ratio de morosidad se reduce hasta el 4,2%, bajando 46 puntos básicos en el semestre. Además, los saldos dudosos descienden 793 millones de euros en el semestre (581 millones de euros menos en el trimestre) situándose en 10.402 millones de euros debido a la gestión activa de la cartera.
CaixaBank acelera las iniciativas de transformación previstas en el Plan Estratégico, y avanza a junio de 2020 el objetivo de disponer de 600 oficinas Store, su nuevo modelo de mayor tamaño y que concentra la actividad de la red anterior. Tras el acuerdo laboral, la entidad asegura que «se reafirma el compromiso de la entidad con la inclusión financiera y la cercanía al territorio con la consolidación de la red de 1.081 oficinas rurales».
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