Sabadell se aferra al dividendo para retener a sus accionistas frente a la opa de BBVA
La posible venta de TSB, con Santander y Barclays como principales interesados, daría mayor capacidad de retribución a la entidad vallesana
Banco Sabadell se aferra a su capacidad de mejorar el dividendo para retener a sus accionistas, que son los que tienen la última palabra en ... la opa de BBVA. La operación entra en unas jornadas clave en las que Sabadell espera poder encarrilar la venta de su filial británica TSB, con el objetivo de entorpecer los intereses de BBVA -al obligar a la entidad a ajustar el canje inicial- y, de paso, reforzar su capacidad de mejorar el dividendo.
La retribución al accionista ha sido pilar de la estrategia de defensa del Sabadell desde estalló la operación. Es más, la entidad ha mejorado cuatro veces su promesa inicial de repartir 2.400 millones de euros entre sus inversores, hasta la estimación actual de 3.400 millones de euros entre la suma de dividendos y recompras de acciones de 2024 y 2025. El mercado descuenta ahora que, si finalmente logra una oferta en firme por TSB, la entidad empleará parte de la venta para volver a elevar esa cifra.
La estrategia pasa por apostar todo a los accionistas, consciente el equipo directivo del Sabadell de que los trámites institucionales (BCE, Competencia, el propio Gobierno y, después, la CNMV), serán superados por BBVA en su afán por hacerse con el banco. Así demostrar mayor músculo para pagar más dividendo puede ser clave para seducirlos de cara a la posible apertura del periodo de aceptación.
Los analistas de Jefferies calculan que el valor en libros de TSB es de unos 1.800 millones de libras (2.100 millones de euros). «Estimamos que Sabadell liberaría unos 1.800 millones de capital si vende a ese precio, que podrían ser devueltos a los accionistas con un dividendo extraordinario o recompras de acciones», apuntan los expertos en un informe sobre la operación para la que, según informa Bloomberg, hay dos candidatos: Barclays y Banco Santander.
La venta, no obstante, perjudicaría la escala del banco presidido por Josep Oliu y limitaría la diversificación de sus ingresos. Pero la entidad juega ya en el corto plazo, dispuesta a echar el resto en la recta final de la opa y justo antes de que el Consejo de Ministros se pronuncie el próximo martes 24 sobre si finalmente impone condiciones adicionales a BBVA.
Fuentes del entorno explican que, para entonces, Sabadell espera tener encarrilado el proceso de venta de TSB, con los acercamientos iniciales recibidos estos días -que sí respetan el deber de pasividad que impide a una empresa opada vender activos- convertidos ya en una propuesta formal para la que el banco tendría que convocar una Junta de Accionistas.
Para ello, primero debe reunirse el consejo, con lo que se espera que la convocatoria pueda realizarse en las dos próximas semanas. Después, habría un plazo legal mínimo de 30 días para su celebración, con lo que el encuentro para votar la venta de TSB se celebraría a finales de julio o incluso principios de agosto, en plena época estival y, previsiblemente y si todo sale según lo previsto, coincidiendo con fechas clave para que la CNMV apruebe el folleto de la opa y abra el periodo de aceptación.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.