La CEV y Cámara de Comercio exigen una solución para evitar la quiebra de Feria Valencia

La Confederación Empresarial de la Comunitat (CEV) y la Cámara de Comercio de Valencia salieron ayer al unísono ante la delicada situación que atraviesa Feria Valencia, que cerró 2020 con unos resultados negativos de 92 millones derivados del procedimiento de subrogación de la deuda de la institución (materializado en la cuenta acreedora con la Generalitat), así como otros dos millones negativos en el resultado de explotación, en este caso a causa del impacto de la pandemia de Covid, que ha provocado la cancelación de certámenes, como el de Cevisama anunciado la semana pasada.

Ante este escenario, que podría abocar a la institución ferial a una situación de insolvencia –como se reconoce en un informe interno de la entidad–, tanto la Cámara como la CEV han instado a la Generalitat y al Ayuntamiento de Valencia a dar una «solución definitiva» ante la «crítica situación» de Feria Valencia y a que concluyan el proceso de reestructuración de la institución.

Así, las entidades que presiden, respectivamente, José Vicente Morata y Salvador Navarro (ambos están en el patronato de Feria y Navarro, además, es vicepresidente en el comité ejecutivo), han reclamado a las dos administraciones implicadas que hagan «cuanto sea necesario para evitar su quiebra».

Los empresarios, en un comunicado conjunto, también quisieron dejar claro «que no es asumible para la internacionalización y el crecimiento de la economía valenciana, ni a medio ni a largo plazo, prescindir de esta institución ferial». En un contexto marcado por la pandemia, «Feria Valencia es una herramienta indispensable para ayudar en la salida de la crisis, cuando la normalidad se recupere».

No es la única reivindicación que hacen CEV y Cámara sobre la institución ferial, pues también una serie de cifras para hacer valer su peso en la economía valenciana, como el 0,5% del PIB de la Comunitat o el 0,6% del empleo anual, además de que las empresas participantes en los certámenes atribuyen entre el 5 y el 20% de su facturación anual a su presencia en los diferentes eventos de Feria Valencia.

«Instrumento de internacionalización» o que es «de especial apoyo para los sectores del comercio y la hostelería» son otras de las expresiones remarcadas por las dos organizaciones en su petición a la Generalitat y al Ayuntamiento que, por otro lado, siguen sin avanzar en la negociación del intercambio de terrenos e inmuebles que debería haberse cerrado el año pasado.

Desde el gobierno municipal se insiste en que la «situación límite» a la que ha llegado Feria Valencia por la pandemia y por la cuenta acreedora de la Generalitat «merece un esfuerzo conjunto de las administraciones» y recuerdan que es un «instrumento fundamental» para los sectores productivos de la Comunitat.

Mientras, la Conselleria de Hacienda, encargada del proceso de subrogación de la deuda, reconoce que la situación es complicada pero se muestra confiada en alcanzar un acuerdo referido a la permuta de terrenos y de la concesión.