El cambio en las tarjetas de crédito y débito que afectará a todos los bancos

Hablar de las tarjetas de crédito y débito es hacerlo sobre uno de los métodos de pago más utilizados en la actualidad. La comodidad de pasar ese trozo rectangular de plástico ante un datáfono y olvidarse de llevar billetes o monedas supuso hace ya tiempo un gran cambio en nuestra forma de pagar. Más rápido, más práctico y sin complicaciones.

A todo ello se unió posteriormente que las tarjetas, concretamente las de crédito, permitían poder añadir gastos a la cuenta aunque no se dispusiera del efectivo in situ, facilitando el cobro a posteriori del importe.

Sin embargo, las nuevas tecnologías siguen evolucionando y las tarjetas de crédito y débito dejarán de ser tal y como las conocemos. Está previsto que para 2024 todas ellas presenten una importante novedad que afectará a los clientes de todos los bancos. Un cambio que se realizará de forma progresiva y que el primero en aplicar será Mastercard. Tras esta empresa, le seguirá el resto.

La novedad en cuestión es la banda magnética, que pasará a mejor vida y desaparecerá por completo para ser sustituida por otras tecnologías como el chip o el pago inalámbrico 'contactless'. «Para 2033, ninguna tarjeta de crédito y débito Mastercard tendrá bandas magnéticas», ha explicado la entidad a través de un comunicado.

La banda magnética, una innovación de principios de los años 60 atribuida en gran medida a IBM, permitió a los bancos codificar la información de las tarjetas en una banda magnética laminada en el reverso. Pero ahora está llegando a su fecha de caducidad, ya que Mastercard se convertirá en la primera red de pagos en eliminarla.

Desde finales de la década de 1990, con la introducción del estándar EMV, las tarjetas con chip empezaron a convertirse en la forma de pago preferida. En la actualidad, los chips EMV se utilizan en el 86% de las transacciones presenciales con tarjeta en todo el mundo.

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