

Secciones
Servicios
Destacamos
CARLOS BONELL
Lunes, 20 de diciembre 2021, 00:00
El caqui no levanta cabeza. La fruta que protagonizó hasta hace poco un fulgurante éxito de expansión en el campo valenciano vive horas bajas, y ... lo peor es que no se acaba de ver la salida.
Algunos llegan a pensar si todo aquel auge sería fruto de una de esas clásicas 'burbujas' que acaban pinchando y se desinflan. Hay opiniones divergentes ante un panorama bastante decepcionante que se repite en los últimos años, con bajos precios y muy pobre o nula rentabilidad, problema que se ve agravado por los altos índices de rechazos de fruta en el campo y los almacenes por 'defectos'.
Unos tienden a pensar que la buena racha del caqui como gran estrella fulgurante se ha acabado, mientras que otros prefieren seguir con el criterio de que continúa siendo una alternativa firme en la que hay que perseverar y con el convencimiento de que, como en casi todo, hay que aceptar vaivenes, subidas y bajadas. Ahora estamos de bajada.
Lo que impulsó en su día una intensa dinámica de sustitución de campos de naranjos y de otros frutales para poner caquis fue la novedad de un tratamiento en cámaras controladas con atmósfera de CO2 que permite eliminar la astringencia de un fruto que, a diferencia de otros, no es comestible recién cogido del árbol. Eso dio alas, además, a una variedad genuinamente valenciana, la 'Rojo brillante', que es la de mayor tamaño, cuestión que es altamente valorada por el consumidor: caquis gruesos, de color intenso, dulces y con una textura firme y distinta a lo conocido hasta el momento. Eso determinó un éxito seguro; sobre todo en la Ribera del, Xúquer, donde surgió la variedad y se asentó con preferencia.
Sin embargo, pasado el tiempo, se fue confirmando el temor de que, con la proliferación de plantaciones, se pudiera llegar a una sobreproducción, y empezaron a multiplicarse los problemas. Hoy es bastante común la imagen impactante de campos de caquis con los árboles ya sin hojas pero repletos de frutos maduros y sin recolectar. Pero aún impresiona más la de fincas ya recolectadas pero con el suelo repleto de frutos, que no han caído por efecto del viento o de otras inclemencias meteorológicas: los han tirado al suelo los propios recolectores, y no por su capricho o mala voluntad, sino porque es lo mandado, el mercado sólo acepta caquis perfectos, con la piel sin ningún defecto, como si fuera de plástico. Si son ecológicos, mejor todavía, pero con la piel 'plastificada'. Casi un imposible. Es habitual que muchos caquis presenten pequeñas incidencias en su piel, como resultado de roces de ramas y hojas, sin que eso incida en su condición interna. Pero no se acepta, sólo la perfección. Y para terminarlo de complicar, los ataques de 'cotonets' han plagado la producción de manchas de melaza y la consiguiente proliferación del hongo conocido como 'negrilla', que devalúa la fruta.
Todos esos caquis, los que presentan mal aspecto, incluso leves manchas o rozaduras en la piel, van al suelo, solo sirven los que tengan la piel como recién salida de una máquina.
Cirilo Arnandis, presidente de la cooperativa de l'Alcùdia y de la DO Kaki de la Ribera del Xúquer, diferencia entre situaciones con graves problemas y altos destríos y las que no presentan tantas incidencias, confiando en que próximas soluciones para las plagas de 'cotonets' y hongos contribuyan a devolver un necesario equilibrio. Reconoce que 25-30 céntimos por kilo en campo no son precios para echar las campanas al vuelo, máxime con elevados porcentajes de fruta sin comercializar, pero se paga algo mejor que el año pasado.
Pascual Prats, presidente de la Asociación Española del Kaki (comercio y productores privados) es más pesimista y teme que de no encontrarse soluciones con rapidez, el caqui se convierta en un consumo vulgar, abocado a una falta de rentabilidad que obligue a un extendido abandono.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.