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El desempleo (426.533 valencianos sin trabajo, según las cifras dadas a conocer la semana pasada) es el mayor problema de la economía valenciana, seguido de la inadecuada dimensión y estructura de las empresas valencianas, la evolución de la demanda y el déficit de infraestructuras y comunicaciones. Así lo señalan los economistas en la última edición de la encuesta que realiza cada seis meses el Consejo General de Colegios Economistas de la Comunitat Valenciana, que se hizo pública este martes.
Un listado de problemas en el que también figuran la escasez en el abastecimiento de agua (aspecto prioritario para los encuestados en Alicante) y los costes laborales o el precio del combustible (dos temas que preocupan mayoritariamente en la provincia de Castellón).
Sobre la situación de la economía valenciana, estos profesionales constatan una «ligera mejoría» de su situación respecto a hace seis meses. No obstante, la visión es generalmente pesimista. Así, si el año pasado, la economía valenciana y española estaban en un suspenso con un promedio de 3,76 y 3,51, respectivamente, en este 2021 se sitúa en 4,50 y 4,38. Las previsiones para dentro de medio año ya superan el aprobado, dejando más altas las expectativas actuales, registrando un 5,39 para la Comunitat y un 5,17 para España.
Entre los principales sectores económicos, la mejor valoración es para la construcción, mientras que en el lado contrario se sitúan el turismo; la industria, especialmente la del automóvil (Ford presentó a finales de mes un nuevo ERTE); o la banca (con grandes ERE en los últimos meses)
El repaso al actual contexto económico no se queda ahí y los profesionales también rechazan la subida de impuestos como medida para el equilibrio de las cuentas públicas debido al déficit generado. Así, un 79% se han pronunciado en contra. El presidente del Consejo de Economistas, Francisco Menargues, explicó que este «rechazo frontal» a subir impuestos radica en que «hay que poner en cuarentena» la afirmación de que España es uno de los países europeos con menor presión fiscal dado que el salario medio de los españoles es menor.
También generan oposición algunas propuestas recientes lanzadas por el Gobierno central, como la implantación de peajes en autopistas y autovías. El 70% se pronuncia en desacuerdo con la medida.
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