Baleària roza los 700 millones de facturación pero reduce beneficios por los costes financieros y ambientales

En concreto, como ha explicado su presidente, Adolfo Utor, ese recorte en la rentabilidad es consecuencia del aumento de las amortizaciones y de los gastos financieros al contraer mayor deuda, la evolución de los tipos de interés y el elevado coste de las normativas medioambientales. En este sentido, la ecotasa marítima (los ETS) supuso para la compañía un desembolso de nueve millones el año pasado para compensar el 40% de las emisiones de CO2 emitidas, mientras que este ejercicio se incrementará hasta el 70%, lo que se traducirá en 26 millones de euros, llegando al 100% en 2026.

Todo ello en un contexto de crecimiento y expansión de la naviera «líder», como ha remarcado Utor, lo que les ha llevado a triplicar las inversiones hasta la cifra de los 309 millones, principalmente en nuevos barcos y en mejorar la eficiencia de la flota. De hecho, la inversión prevista es de 1.000 en el periodo 2017-2028 para 13 barcos y seis remotorizaciones. Por ejemplo, en los astilleros Armon de Gijón se está construyendo el tercer catamarán de última generación con motores duales a gas, que se prevé tener listo para finales de año.

El endeudamiento asciende a 650 millones y, según Utor, responde precisamente a las nuevas construcciones de barcos y de ellos 300 corresponden a la inversión realizada en 2024.

Respecto al negocio de la naviera, se alcanzaron los 5,67 millones de pasajeros -mayoritariamente nacionales-, un 8% más, y se transportaron 1,51 millones de vehículos, un 10% más. Por volumen de facturación, el transporte de pasajeros representa un 61% y el de mercancías un 35%, mientras que las rutas nacionales siguen abarcando el 75% en la facturación por zonas, con Baleares como principal destino.

Baleària operó el año pasado 28 rutas en cinco países, "gracias a una amplía flota de unos 40 buques, la mayoría en propiedad". Así, abrió tres nuevas rutas con Argelia y otra con Tarifa-Tánger Ville.

La plantilla también creció un 4% hasta alcanzar los 2.600 trabajadores, de los que el 96% son indefinidos «no porque lo diga la ley sino porque es un componente de estabilidad y competitividad», ha apuntado Utor, que también ha destacado la diversidad en los barcos con 60 nacionalidades, pues «es competitividad fundamentalmente en las líneas internacionales».

Sobre el futuro, la expansión de internacional pasa por "seguir creciendo en Argelia y abrir la ruta entre la República Dominicana y Puerto Rico". Precisamente sobre esto último Utor se ha mostrado cauto porque "la situación política americana puede poner en riesgo la operación". "Espero poder anunciar pronto que iniciamos pero hay necesidad de confirmar algunas cosas. El trabajo está hecho pero pendiente de cuestiones burocráticas para iniciar las inversiones en los puertos", ha detallado.

Sobre la situación de la terminal de pasajeros en el puerto de Valencia, adjudicada en 2022 y que debía estar operativa este año pero que encalló por un conflicto que MSC, Utor ha reconocido que se ha retrasado y está "en standby" debido a las nuevas peticiones en la parte de cruceros. No obstante, ha avanzado que la situación se encuentra "prácticamente resuelta" gracias a un acuerdo con la Autoridad Portuaria de Valencia a falta de algunos flecos jurídicos.

"No puedo hablar de los detalles en este momento en aras de que esto tenga una solución óptima. Esperamos que esté antes de verano porque Baleària necesita una terminal y que antes de que acabe este año tengamos clara la adjudicación y podamos empezar las obras", ha añadido Utor.