Climent exigirá licencia autonómica para abrir o reformar supermercados

Vuelven las tensiones entre la Conselleria de Economía y los comercios tras dar por zanjada la polémica sobre las aperturas en festivo con el pacto alcanzado la pasada legislatura para cerrar uno de cada tres festivos en ciudades como Valencia o Alicante. En esta ocasión, por el anteproyecto de Ley de Comercio Sostenible, publicado el pasado viernes y que introduce la exigencia de autorización autonómica para la apertura, reforma o ampliación de establecimientos de más de 1.000 metros cuadrados de superficie comercial con el argumento de que tienen impacto territorial.

La decisión de rebajar de 2.500 a 1.001 metros cuadrados el listón para exigir una segunda licencia aparte de la municipal, salvo en áreas a potenciar por considerarlas 'de oportunidad comercial', complica los planes de crecimiento de operadores como Mercadona, Consum o MasyMas, cuya superficie media ronda los 2.000 metros cuadrados de sala de ventas.

Así lo confirmó a este periódico Pedro Reig, director de la organización que representa a esas enseñas, Asucova, para quien la medida implica «volver atrás en el tiempo en algo en lo que no había ningún problema ni ninguna fricción».

Se trata, a su juicio, de imponer «trabas evitables, sin motivo ni fundamento», que implicarán «ralentizar y burocratizar todos los proyectos de ampliación y renovación« que tienen en marcha la empresa de Juan Roig o la cooperativa Consum en sus respectivas redes de supermercados. Desde Asucova dan por sentado que recuperar la exigencia de ese permiso autonómico «perjudicará la estrategia de expansión y crecimiento» de este tipo de compañías y se preguntan «qué problemática ha generado el modelo de implantación de supermercados».

Es por eso que ya manifestaron su oposición a esa medida en las alegaciones al Plan de Acción Territorial Sectorial del Comercio de la Comunitat (Patsecova), actualmente en tramitación como decreto y que también niega la autorización a los proyectos que superen los 120.000 metros cuadrados de superficie comercial, como Intu Mediterrani, por considerarlos incompatibles con los criterios de sostenibilidad exigidos.

Desde Asucova aún confían en que el Patsecova atienda sus argumentos para limitar la exigencia de autorización autonómica a los establecimientos que superen los 2.500 metros cuadrados de superficie comercial. No obstante, en vista de que Economía extiende ese requisito a los supermercados en su anteproyecto de Ley de Comercio Sostenible, también presentarán alegaciones a ese proyecto normativo.

En septiembre, el conseller Rafael Climentanunció en Les Corts una nueva ley para «actualizar la norma sobre ordenación territorial del comercio», en línea con el Patsecova que prometió aprobar en diciembre, y para «regularizar, aclarar y armonizar las normas con rango de ley vigentes», como las relativas a la última restricción de aperturas en festivo o las futuras trabas a las tiendas de conveniencia.

Esas medidas, que se plantearon como modificaciones de la ley anterior, quedaron pendientes después de que la llegada del PSOE al poder enterrase la impugnación del Gobierno, y se tramitarán ahora mediante esa nueva ley autonómica.

Los representantes de los supermercados (Asucova) y de grandes superficies como Carrefour o El Corte Inglés (Anged) admiten su malestar con la conselleria por publicar un anteproyecto de ley de ese calado, con quince días para alegar, sin haberlo abordado con el sector.

«Se echa en falta el espíritu de diálogo y la búsqueda de consenso de la primera mitad de la legislatura anterior«, señaló el portavoz autonómico de Anged, Joaquín Cerveró, quien critica que «una vez resuelto el asunto más espinoso para la Administración, que era el tema de los horarios, vuelve a actuar de espaldas al sector».

Ambas entidades cuestionan que el anteproyecto incorpore cambios previstos en el Patsecova, sin estar aprobado, y deje fuera cuestiones como los requisitos para declarar una zona de libre apertura en festivo.