Entrecanales anima a los empresarios a meterse en política cuando se jubilen

El presidente de Acciona, José Manuel Entrecanales, lanzó este lunes un mensaje contundente contra las patronales durante la mesa redonda 'El papel clave de la Empresa Familiar durante la crisis y la recuperación', enmarcada en el Congreso de Empresa Familiar. «Tenemos un problema con nuestros interlocutores sociales, ya que la mayoría no son empresarios», sentenció en el debate, donde también participaron el presidente de la multinacional Puig, Marc Puig, y el copresidente de Barceló Corporación Empresarial (Barceló Hoteles), Simón Pedro Barceló.

Entrecanales criticó que la cuestión estaba en que la mayoría de los representantes de las organizaciones empresariales no dirigen ningún negocio. «Primero habría que resolver la condición escasamente empresarial de nuestros representantes y, luego, creo que tenemos que hacer un esfuerzo por involucrarnos en mandar nuestro mensaje social», prosiguió el dirigente, que insistió en la necesidad de que los dirigentes estrechen lazos con el resto de la sociedad para «dejar de ser atacados como marcianos». Por otro lado, al final del debate, el presidente de Acciona animó a los empresarios a meterse en política cuando se jubilen debido a las perspectiva que pueden aportar gracias a su experiencia profesional.

Por su parte, Barceló reconoció que «algunos empresarios de la CEOE que no han sido ejemplares», en alusión a Gerardo Díaz Ferrán, quien se encuentra en prisión por varias causas judiciales, entre ellas el conocido caso Marsans.

Con esta afirmación, hizo un llamamiento a la autoexigencia y autocrítica por parte del empresariado español para, de ese modo, generar confianza ante la sociedad. «Los empresarios tenemos que ser ejemplares. Si queremos exigir, tenemos que elevar nuestro nivel de exigencia para ser ejemplares. Si no, perdemos credibilidad», aseguró en respuesta a la pregunta de 'cómo se puede mejorar la figura del empresario', realizada por el presidente de KPMG en España, Hilario Albarracín, que intervino en calidad de moderador.

Por otro lado, Marc Puig destacó la responsabilidad de que las instituciones reconozcan la labor del tejido empresarial en la salida de la crisis. En ese sentido,consideró que los mensajes de reconocimiento debían lanzarlos «terceras personas» ajenas al mundo empresarial. «No oigo a ningún político reconocer la labor de los empresarios, que son los que nos han sacado de la crisis», lamentó.

Otro de los temas abordados durante la mesa redonda fue cuál es la asignatura pendiente de la empresa familiar. Barceló y Puig coincidieron ante la pregunta al indicar que el mayor reto es y seguirá siendo la sucesión empresarial. «Nosotros, tercera generación, acabamos de incorporar a los estatutos limitaciones en la edad para ocupar los puestos de presidente, vicepresidente y consejero delegado. Para mí, la sucesión es clave y si se puede planificar, muchísimo mejor», contó Barceló.

Por su parte, Puig afirmó que «los mecanismos de renovación están oxidados» y que en la transición es donde se producen «los mayores retos». En ese sentido, Puig considera que la única solución es que los empresarios compartan sus experiencias para ver cuáles son las mejores fórmulas.

Por contra, el dirigente de Acciona sostuvo que la principal asignatura pendiente es el impacto medio ambiental generado por la actividad empresarial. «Yo creo que estamos muy atrasados en nuestro compromiso contra el cambio climático. No es un tema prioritario para la empresa familiar. Todas las empresas tienen la oportunidad de contribuir a paliar este riesgo en beneficio propio. Esto no sólo es un riesgo tremendo, es una oportunidad única», aseveró.