La crisis derivada de la pandemia, la falta de materias primas, el encarecimiento de los costes energéticos y de producción, y, ahora, las consecuencias de la guerra en Ucrania ... dibujan un escenario de incertidumbre para el comercio internacional. Según los analistas de Cámara Valencia, la solución para numerosas empresas valencianas pasa por diversificar sus exportaciones a otros mercados, con el objetivo de esquivar la ralentización que sufrirá especialmente Europa.
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En concreto, se producirá una mayor diversificación hacia zonas geográficas con mejores perspectivas de crecimiento como Estados Unidos, Latinoamérica, África Occidental y la Asociación de Naciones de Asia Sudoriental. «Las empresas se enfrentan a un escenario de incertidumbre y cambios sustanciales, tanto en los procesos productivos como en los mercados internacionales y perspectivas de futuro», añade el organismo en un informe que ha realizado sobre las exportaciones valencianas.
En términos generales, Cámara prevé que las exportaciones sigan creciendo, pero a un ritmo más moderado, debido a la ralentización del crecimiento económico de los principales mercados de exportación. Las manufacturas de consumo y productos agroalimentarios se verán afectados negativamente en los países europeos, como consecuencia de dicha desaceleración, la pérdida de poder adquisitivo de los consumidores ante la mayor inflación y el mayor grado de incertidumbre.
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Sin embargo, la demanda de semimanufacturas, materias primas y productos intermedios -sobre todo la procedente de Europa y mercados cercanos- se verá acentuada como consecuencia del acortamiento de las cadenas de suministro y la prioridad de la disponibilidad y calidad del producto frente al precio. Por otro lado, la recuperación del sector del automóvil a nivel internacional seguirá vinculado a la resolución de los problemas de suministro de productos intermedios (microchips), y los avances tecnológicos en el sector.
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«A medio y largo plazo, trabajar en mercados internacionales va a suponer cambios en la gestión de stocks, en la producción 'just in time', en los sistemas logísticos y distribución, así como en las políticas de fijación de precios», agregan desde el organismo, que ha destacado los datos de 2021, que registraron un «récord histórico« de exportaciones de 32.413 millones de euros, un incremento del 11,3% respecto al año anterior. Los productos con mayor dinamismo exportador, superando ampliamente los niveles prepandemia, fueron las baldosas cerámicas al crecer un 24,9% respecto a 2020 y un 30,4% respecto a 2019. En la misma línea, crecieron los esmaltes, fritas y pigmentos y les siguieron los alimentos frescos -frutas y hortalizas- y los zumos.
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