

Secciones
Servicios
Destacamos
Conocido y reconocido por su defensa de los consumidores desde Avacu, Fernando Móner se pone ahora al frente del Consejo Económico y Social de ... la Comunitat (CES-CV) con el objetivo de visibilizar la labor de este organismo y de mantener la «vocación de servicio público» que ha caracterizado sus 38 últimos años de trayectoria profesional.
–¿Qué supone estar al frente?
–Estamos hablando de una institución recogida en nuestro Estatuto y que aglutina la verdadera participación, puesto que están los agentes más importantes de la sociedad civil, unidos, en consenso y haciendo dictámenes de las leyes que nos tienen que regular como sociedad. Para mí es un honor estar al frente tras 11 años de consejero. Creo que los problemas actuales son muy diferentes a los de hace 20 años y, además, son problemas reales que nos afectan como ciudadanos, como consumidores... Por tanto, creo que también es un refrendo a eso, a buscar soluciones a esos nuevos problemas que tenemos en el siglo XXI.
–¿Se plantea cambios o un nuevo plan estratégico?
–Lo primero es una propuesta para modificar tanto la ley como el reglamento que regula esta institución porque se hicieron en 2014 y ahora tenemos que hacer una norma del año 2025 que, además, nos permita ser ágiles. Le pedimos a las administraciones que sean ágiles a la hora de regular, así que organismos como el CES también tienen que serlo.
–¿Y hacerse más visibles?
–Sí, estamos hablando de una institución imprescindible para el ciudadano, que debe saber qué es, cómo funciona, a qué nos dedicamos, no sólo en los dictámenes de los proyectos de ley, sino también en las recomendaciones que podemos hacer al Gobierno en cuanto a informes de problemas que vemos en la sociedad. Ya se han empezado a hacer cambios. De hecho, el plan estratégico que acaba este 2025 contempla ser mucho más visible.
–¿Dónde debe poner el foco?
–Estamos inmersos en un informe para profundizar en lo que llamamos economía sumergida, que parece que está por ahí ¿pero realmente le podemos dar forma? ¿Podemos saber hasta dónde llega, qué patrones sigue o qué medidas hay para atacarla? También un informe sobre las zonas rurales. Al final, los problemas de hoy posiblemente sean diferentes a los de dentro de dos años, por lo que tenemos que intentar adelantarnos viendo el pálpito de la ciudadanía. Eso, por ejemplo, en Avacu lo detectamos porque estamos en el día a día con los consumidores. Así que el CES tiene que ser algo parecido, observar mucho y ayudar a que las políticas de la Generalitat sean más efectivas.
–Es presidente de Avacu desde 1997. ¿Cómo ha evolucionado el consumidor en estos años? ¿Conocemos nuestros derechos o somos muy dejados?
–Sigue habiendo mucho de eso último. Por desgracia es cuando nos tocan los problemas cuando nos activamos. El consumidor de ahora está más preocupado por todo lo que se relacione con su salud, que al final tiene que ver con la alimentación, el bienestar, etc. Otro tema preocupante es la repercusión que tienen las 'fake news' en nuestro estilo de vida. Y en muchas cosas hemos mejorado; una de ellas es la concienciación de que somos consumidores y tenemos nuestra dosis de responsabilidad. Ahora, si me preguntan '¿Y en comparación con el resto de Europa?', pues diría que siento cierta envidia del norte de Europa, inclusive de Estados Unidos. Cuando cualquier éxito de una organización de consumidores seria y responsable es un éxito para todos porque todos somos consumidores.
–¿Cuáles son los sectores con mayor número de demandas?
–Van cambiando aunque el 'top ten' no cambia mucho. Telecomunicaciones –que es normal por los millones de contratos que hay– aunque ha bajado mientras ha subido vivienda porque el mercado inmobiliario se ha animado mucho en los últimos años. Y el sector bancario, que nos ha dado muchos problemas porque yo siempre he dicho que se comporta de una manera prepotente con los ciudadanos. Es verdad que algunos están reculando y escuchando, pero todavía sigue habiendo un bueno de reclamaciones. Y las energéticas.
Fernando Móner
–Menciona la banca. ¿Cómo perciben desde Avacu la opa del BBVA sobre el Sabadell?
–Al final cuantas menos entidades, menos competencia. Y lo bueno que tiene el consumidor es la competencia. Es decir, si solamente hay tres puede haber más situaciones que lesionen los intereses de los consumidores que si hay 50. También es cierto que lo que necesitamos es un equilibrio, porque si al final la dimensión de una empresa no es lo suficientemente importante como para competir con el extranjero, podemos quedarnos sin grandes empresas españolas. En este caso concreto, ya dijimos que no nos parecía muy bien porque se perdían oficinas y ofertas financieras, pero siempre pensando que al final tiene que ser el regulador quien diga que no se va a perder el nivel de competencia.
–¿Y en transporte ha habido un incremento de quejas?
–Sí, se nota que hay una cierta problemática. Es verdad que en la Comunitat, en estos últimos meses, es muy difícil marcar un nivel de calidad de servicio por todo lo que hemos sufrido, pero siempre hemos tenido trayectos deficitarios como el de Xàtiva, Utiel o el Euromed que viene de Alicante. Desde Avacu estamos apoyando desde el principio el corredor mediterráneo por dos dedos de frente: no puede ser que de Alicante a Valencia o a Barcelona se tarden tantas horas. Tenemos un servicio público que se debe mejorar.
–En España, ¿tardan mucho en aplicarse las leyes que benefician a los consumidores?
–Creo que en España tenemos muchas normas de protección muy buenas pero no tenemos un control suficiente por parte de las administraciones del cumplimiento de las mismas. Aún así, hay un nivel de cumplimiento, mejorable, pero alto. Y luego hay aspectos que no se entienden, como la nueva normativa de prevención de bebidas alcohólicas en menores que quiere acabar con los patrocinios, incluso con los mensajes de consumo moderado. Y no creo que haya que cambiar algunos aspectos. ¿Por qué? España es el primer país del mundo en consumo de cerveza sin alcohol quizá porque las palabras moderación y responsabilidad han calado. Además, en un encuentro reciente ponía el ejemplo de que si esa ley estuviese en vigor a lo mejor no teníamos Fallas. Es decir, no quiero leyes que no nos permitan casi ni respirar, sino que se necesita mucha pedagogía y concienciación.
–Se van a cumplir cinco meses de la dana, ¿cómo percibe la situación en la zona afectada?
–Con mucha pena e intentando que la llama no se apague. El Gobierno de España debe ser consecuente con lo que ha ocurrido aquí, que, por desgracia, es algo histórico en lo negativo, en los daños. Necesitamos que España y la Unión Europea se vuelquen. En un acto el vicepresidente [Gan Pampols] comentaba que el 60% de los ascensores están pendientes de arreglo y no hay ni empresas ni especialistas suficientes. Igual que no hay carpinteros ni albañiles. La dana no es un problema valenciano, es un problema de España y de la Unión Europea, que deberían volcarse. Si estamos en la UE es para que cuando suceden estas cosas se vuelquen todos los recursos para regenerar y se pongan medidas para que no vuelva a ocurrir o se minimicen las consecuencias.
–¿Las administraciones han hecho lo suficiente, especialmente en el capítulo de las ayudas?
–Creo que todas las administraciones, desde el primer día hasta hoy, podrían haber hecho más. Soy consecuente con los recursos que se tienen pero se podría haber hecho más, y más deprisa. Y los ciudadanos queremos que den solución a los problemas y no tanta crispación entre ellas.
–¿Gobierno y Consell han estado a la altura en la gestión de esta crisis?
–No se puede generalizar porque seguro que en todas las administraciones ha habido gente trabajando muy duro, estoy seguro. Pero la sensación que se traslada es que se ha intentado sacar un rendimiento político.
–Es presidente de Avacu, del CES y sabe de la importancia de los liderazgos, de esas personas de referencia que tiren del carro en las crisis. ¿Es Carlos Mazón el líder que necesita en estos momentos la Comunitat?
–Sé que la implicación que está teniendo es del 100%. No voy a justificar si el presidente de la Comunitat, el del Gobierno, la delegada o los alcaldes tienen que seguir. Creo que los que están ahora, estén durante un mes más o durante cinco años más, se deben dedicar exclusivamente a sacarnos de todo esto sin olvidar, obviamente, el día a día.
–¿Ha podido revisar ya los presupuestos del Consell?
–No, sólo a nivel general. Estamos ante unos presupuestos excepcionales y lo que sí que tenemos claro es que seguimos siendo una comunidad infrafinanciada y eso lo pagamos los ciudadanos. Es decir, no puedo decir que tengo los mismos derechos que mis compañeros del País Vasco, Cataluña, Madrid porque tenemos un sistema de financiación que no nos permite financiar en mejores condiciones los servicios sociales o la sanidad.
–Como sociedad civil, ¿nos tenemos que poner las pilas?
–Sí, aunque tenemos buenos ejemplos en esta comunidad, como la unión por el corredor mediterráneo o la mejora de la financiación. Al final, si queremos que la Comunitat siga subiendo escalones, tenemos que ir todos de la mano y la política tiene que ser un ejemplo en positivo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.