La Comunitat Valenciana es la segunda autonomía con impuestos más altos tras Cataluña

En este escenario de brechas fiscales y amplias diferencias territoriales, Madrid se presenta como la comunidad fiscalmente más competitiva, ampliando en tres décimas, hasta los 2,86 puntos, su brecha con Cataluña, que ocupa la última posición del índice autonómico elaborado por la Fundación para el Avance de la Libertad y la Tax Foundation.

El indicador no contempla aún las reformas anunciadas por varias comunidades en las últimas semanas. Es decir, que en el análisis no figura ni la anunciada supresión del Impuesto de Patrimonio andaluz ni el reciente anuncio de la rebaja impositiva para las clases medias y bajas valencianas. Tampoco la futura tasa turística.

El estudio otorga a cada autonomía una nota de competitividad fiscal y la otorgada a la Comunitat Valenciana es un 5,02 frente al 6 de media o el 7,43 de Madrid, la más alta. Esto es debido a que tiene una regulaciones «más gravosas» en Sucesiones, Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados. En el caso del primer gravamen los datos evidencian que es el segundo más alto de toda España, en el segundo que es una excepción europea y en el tercero que directamente lidera el ránking nacional al tener un tipo de 1,5%.

Otra de las brechas más destacadas se produce con el Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF), que acumula gran parte de la recaudación. En este caso todas las autonomías y las tres diputaciones vascas tienen tipos impositivos marginales máximos por encima de la media de los países analizados (42,94%). Pero la Comunitat Valenciana (54%), Navarra, La Rioja, Canarias, Asturias, Cantabria, Cataluña, Aragón, Baleares y Extremadura, más las tres diputaciones vascas tienen un tipo impositivo máximo más alto que Alemania (47,5%). En el caso valenciano las rentas más bajas no pagan las cotizaciones más altas del estado, pero sí están en la media. Y queda pendiente saber hasta qué punto influye la rebaja fiscal anunciada por el presidente Ximo Puig.

Madrid es la única región que ha mantenido un tipo impositivo máximo del 45%, en sintonía con países europeos como Alemania, Reino Unido, Luxemburgo, Suiza, Noruega, los estados del este de Europa o los bálticos.

Esta situación es fundamental para que en la parte alta de la tabla, y solo por detrás de Madrid, se sitúen Vizcaya, Álava y Guipúzcoa, que mantienen la segunda, tercera y cuarta posición, respectivamente. «En el año 2022 las diputaciones han deflactado la tarifa del Impuesto sobre la Renta y los mínimos personales y familiares. Además, debido a los altos niveles de inflación han anunciado una nueva deflactación del 4% de la tarifa que debería haber entrado en vigor el 1 de septiembre», señala el documento.

Las organizaciones que se encargan de este estudio también resaltan que la Comunitat Valenciana tiene cuatro impuestos propios (canon de saneamiento, sobre actividades que inciden en el medio ambiente, sobre la eliminación de residuos en vertederos y sobre viviendas vacías) y pide eliminarlos. Del mismo modo, propone suprimir o bonificar el Impuesto de Patrimonio, reformar los tramos del IRPF, modificar el de Sucesiones y Donaciones y bajar el gravamen de Actos Jurídicos Documentados y el de Transmisiones Patrimoniales.