El nuevo modelo de Ford para Almussafes ofrece oxígeno a la plantilla ante una larga travesía

«Nos hemos hecho oír y la compañía nos ha tenido en cuenta. Ahora hay que hacer la travesía», explicaba el secretario general de UGT-Ford, Carlos Faubel, dos días después de reunirse con la cúpula de la multinacional en Dunton (Inglaterra).

Una travesía cuya próxima fecha clave es el 10 de abril, día en el que tendrá lugar una nueva reunión con los dirigentes de la compañía. Será entonces cuando empiecen a concretarse los primeros detalles del nuevo vehículo que llegará a Almussafes. Aunque Faubel cree que el modelo concreto y el volumen de producción no se conocerán hasta dentro de «un par de meses», ya que todavía quedan pendientes varias reuniones.

Por el momento, lo único que se sabe del nuevo modelo que recibirá la planta es que será «un vehículo de pasajeros multi-energía» completamente nuevo respecto a la gama de productos en Europa de la marca del óvalo. La adjudicación satisface las demandas de UGT, que había pedido a Ford un híbrido que mantuviese con vida a la factoría valenciana. «Lo único que queríamos era garantizar el empleo. Pedíamos un híbrido porque le veíamos varios años de duración. Necesitamos vehículos con penetración en el mercado», analizaba Faubel, que deberá viajar hasta Colonia (Alemania) para citarse de nuevo con los dirigentes de la compañía.

Justo una semana después de esa reunión, la factoría se despedirá de la Ford Transit y su producción se reducirá únicamente al Ford Kuga. La pérdida parece ahora solventada con la llegada de un nuevo modelo, según apuntan desde UGT. «La situación se había complicado bastante. Del problema que íbamos a tener el día 17 de abril hemos pasado a tener una solución. Esto da mucha calma», explica el secretario general del sindicato mayoritario en la planta.

Una calma tensa, ya que la otra fuerza sindical con representación en Ford Almussafes se mostró algo más crítica con la nueva medida propuesta por la compañía. Desde STM consideran que se incumple el plan acordado, ya que la planta valenciana debería estar fabricando modelos de dos plataformas desde «hace más de dos años», y exigen que la dirección respete a los trabajadores de la multinacional.

De tal modo, la plantilla también tendrá otra fecha marcada en rojo en el calendario, la del 19 de abril. Ese día finalizará el ERTE que en la actualidad afecta a 700 trabajadores al día en las plantas de vehículos. Será un momento clave, ya que el anterior ERTE planteado por la multinacional norteamericana dio paso a un inmenso ERE, que perjudicó a más de un millar de trabajadores. Desde UGT consideran que todavía «es pronto» para definir si será necesario un nuevo expediente de regulación de empleo, ya que «habrá que ver el volumen del producto y la cantidad de gente que es necesaria» una vez llegue el nuevo modelo a Almussafes. Faubel piensa que «en el hipotético caso de que se dé» un nuevo ERE «será fácil de manejar y no supondrá complicaciones».

El anuncio de la nueva adjudicación es una noticia «fantástica para Europa y para Valencia», como anunciaba el director de fabricación de la planta de Almussafes, Daniel Ruiz, en un comunicado. Aunque «no será cuestión de pocos días», como reflejaba UGT en su nota. De modo que la multinacional tiene por delante una travesía de varios meses antes de empezar a producir el nuevo modelo que el director mundial de la compañía prometió tras la reunión del miércoles en Inglaterra.