La tercera reunión entre la dirección de Ford Almussafes y los sindicatos para negociar el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que llevará al despido de 630 trabajadoresha vuelto a terminar sin acuerdo tras evidenciarse el distanciamiento de las posiciones de los dos actores. La cúpula de la firma no acepta, al menos por el momento, la propuesta de los representantes de los empleados para que se pueda acceder a las prejubilaciones a partir de los 55 años y mantiene la propuesta de que este umbral este en los 57.
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Tal y como han informado los sindicatos, este es el principal escollo que aún está por superar pero confían llegar a un acuerdo en los próximos días. Desde el comité de empresa que encabeza UGT se ha insistido en que la propuesta presentada cuenta con el respaldo de en torno a 3.000 trabajadores que han votado a través de una aplicación informática y han recalcado que aspiran a que la mayor parte de las salidas sean con unas condiciones dignas.
El principal problema de la negociación de este ERE radica en que el año pasado ya se aprobó uno similar con un impacto en 300 personas y con este movimiento la bolsa de personas cercana a la jubilación quedó casi agotada. Es cierto que tras el anuncio de que la factoría valenciana producirá el nuevo motor híbrido para toda Europa la tensión se ha rebajado pero aún así se asume que que puede haber despidos traumáticos.
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