Así es la fórmula de la 'mochila austríaca' que propone el Banco de España con los fondos europeos: del despido a las pensiones de jubilación

Una vez más aparece encima de la mesa la posible aplicación de la 'mochila austríaca' en España. En este caso ha sido el último informe remitido por el Banco de España, en el que se propone que 8.000 millones de euros de toda la cantidad que perciba España de los fondos europeos de recuperación se destinen a la puesta en marcha de este sistema que, en grandes rasgos, se traduciría en menor coste de despido para las empresas pero un ingreso asegurado para el trabajador que se puede acumular si cambia de mercantil. Así es la fórmula de la 'mochila austríaca' que se aplica en Austria desde 2003.

Cada trabajador, cuando inicia una relación laboral, vería como se crea a su nombre una cuenta bancaria que se basa en un fondo de capitalización. Mensualmente la empresa abona un porcentaje determinado del sueldo bruto provocando que la cantidad de esta cuenta se vaya incrementando mensualmente. La clave estaría en que esta cuenta de ahorro del empleado estaría gestionada por fondos privados para que se genere una rentabilidad adicional.

El montante económico que se va generando mensualmente puede ser consultado por el trabajor, pero únicamente se puede acceder a él en tres situaciones muy específicas. En Austria, lugar en el que se empezó a utilizar este sistema en 2003 y por ello recibe el nombre de 'mochila autríaca', para que un trabajador pueda disponer de ese dinero ahorrado en su nombre debe registrar tres años consecutivos de ingresos a este fondo. Así, en caso de finalización del contrato, despido o jubilación se puede acceder a ese montante. En el caso del despido implicaría que el dinero percibido ya no sería abonado a modo de indemnización por parte de la empresa, ya que el trabajador tendría a su disposición ese dinero que la mercantil ha destinado mensualmente de la parte de su salario bruto.

Este es el punto que más críticas sindicales recibe en españa, ya que el coste por despido se vería reducido drásticamente si se aplica al 100 % este modelo como en Austria. El Banco de España estima que este coste sería un 50 % menor que el actual ya que las empresas habrían costeado la 'mochila' de su plantilla. Esta cuenta de ahorro es personal e intransferible y no se pierde tras un cambio de empresa. Simplemente, el nuevo puesto de trabajo pasaría a ingresar en la 'mochila' que ya hay abierta a nombre del empleado.

El Banco de España ha realizado esta propuesta justificando que de esta forma se propone «acabar con la dualidad del mercado laboral español, que tiene una alta tasa de temporalidad«. Esta relación entre la 'mochila austríaca' y la temporalidad laboral radica en los posibles beneficios que obtendría una empresa en caso de aprovechar este nuevo sistema para reducir la rotación en su plantilla y asegurar un incremento prolongado de la 'mochila austríaca' de cada empleado.