El Gobierno alerta al Consell de la pérdida de recaudación por falta de personal

La lucha contra el fraude fiscal y la recaudación de impuestos en la Comunitat no pasa precisamente por un buen momento. El Gobierno central ha alertado a la Generalitat de que se arriesga a perder dinero en la gestión de tributos por el escaso personal que debe afrontar un ingente volumen de trabajo. Así se desprende del informe anual del Ministerio de Hacienda sobre 2017, emitido el pasado mes de julio, y donde analiza la labor realizada por los organismos tributarios de cada administración autonómica.

El documento, al que ha tenido acceso LAS PROVINCIAS, insta al Instituto Valenciano de la Administración Tributaria (IVAT) a incrementar el número de trabajadores para poder asumir todas las inspecciones -la palabra técnica es liquidaciones de expedientes-. Según indica, existe la «amenaza real» de que prescriban los expedientes y que, por tanto, ya no se puedan recaudar los impuestos correspondientes. «Parece urgente dotar a las áreas liquidatorias de las Oficinas Gestoras del personal técnico necesario para evitar la amenaza real de prescripción de derechos», sentencia.

El informe asegura que «resulta particularmente revelador» el porcentaje de vacantes en la Dirección General de Tributos y Juego y en el IVAT de personal técnico, que alcanza el 57,43%. «Dichas vacantes, dado su elevado número, afectan a todos los ámbitos de actuación del IVAT pero de forma más acusada a las áreas liquidatorias y, por tanto, pueden comportar mermas recaudatorias», apuntan desde el Ministerio.

Hacienda señala en especial el funcionamiento en la Oficina Gestora de Alicante, donde asegura que el ritmo de despacho de expedientes «es muy reducido». En Alicante y en Valencia sólo hay un técnico liquidador en cada una de las oficinas, lo que «lastra la gestión», según el estudio. «Por otra parte, también se ve afectada por el gran volumen de devoluciones a realizar como consecuencia de las anulaciones de liquidaciones por los tribunales», determina.

En concreto, estos expedientes tienen una vigencia de cuatro años para poder ser liquidados. Sin embargo, no es la primera vez que la Generalitat pierde recaudación por falta de profesionales y técnicos tributarios. Como publicó este periódico, hace apenas dos años el IVAT renunció a recaudar ocho millones de euros tan sólo en lo que respectaba al impuesto sobre Sucesiones correspondientes a 2012 en la provincia de Valencia, precisamente por falta de inspectores que pudieran revisar dichos documentos. Y, es que, la falta de personal en este organismo no es nada nuevo y ya se remontaba a los años en los que gobernaba el PP.

Aun con todo ello, dicha situación se agravó en 2016 cuando la Conselleria de Hacienda decidió cesar a 38 técnicos interinos, el 60% del equipo en ese momento. Tras aquella decisión, el IVAT incorporó a doce personas de categoría A2, que aprobaron la Oferta de Empleo Público en 2014. No obstante, los técnicos A2 no están autorizados para firmar liquidaciones, por lo que la idea de la Generalitat era ir incorporando a funcionarios A1.

Al respecto, Hacienda incide de manera concreta en este punto al instar al Consell que «no debe dejarse de lado tampoco la necesidad de iniciar procesos selectivos para personal del Grupo A1 que pueda ejercer las funciones directivas del IVAT».

Ante esta situación de caducidad de expedientes que conllevaron la pérdida de millones de euros en la recaudación, la conselleria que lidera el socialista Vicent Soler decidió implantar un sistema de alarmas para evitar las prescripciones tributarias sobre todo en relación al Impuesto de Sucesiones y Donaciones y al Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados, los que más ingresos suponen para las arcas valencianas.

Pese a todo ello, los esfuerzos no son suficientes a tenor del informe de Hacienda que, además, se suma a las advertencias previas sobre la gestión en 2016. «Se mantiene la situación, ya descrita en anteriores informes, derivada de la Resolución de 13/5/2016, de amortización de los puestos de interinos (A 1) que no ha venido acompañada de la deseable agilidad en los procesos de convocatoria de procesos selectivos y que, en consecuencia, mantiene en déficits notables de personal a la administración tributaria valenciana», indica el departamento que dirige María Jesús Montero.