Javier Gómez Trénor asume el control de la segunda fortuna de la Comunitat

La herencia de Juan Luis Gómez Trénor ya tiene nuevos dueños. Tras el fallecimiento el pasado mes de febrero de quien poseía la segunda mayor fortuna de la Comunitat Valenciana, su hermana y sus sobrinos han pasado a ser consejeros en la empresa de la que penden las participaciones empresariales en Coca Cola o Ebro Foods, la base de su riqueza.

Soltero y sin hijos, Juan Luis Gómez Trénor fue administrador único hasta el último momento de la mercantil Empresas Comerciales e Industriales Valencianas (Ecivca). Sin embargo, como informa el Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme), la sociedad es presidida desde el pasado día 12 de septiembre por su sobrino Javier Gómez Trénor Vergés, que ya ejercía de mano derecha de su tío los últimos años y que ha sido el administrador mancomunado de la sociedad, junto a Ignacio Muñoz, hasta que se ha completado el proceso.

Como vicepresidente queda otro sobrino, Álvaro Gómez Trénor Aguilar, mientras que la secretaría del consejo de administración corresponde a su sobrina Caridad Lassala. Asume el cargo de vicesecretario Javier Pastor, íntimo colaborador de Juan Luis Gómez Trénor. El resto del consejo está formado por la hermana del fallecido María Caridad Gómez-Trénor Fos y sus sobrinos María Julia y Francisco Gómez-Torres Gómez-Trénor; María Victoria y María del Carmen Gómez-Trénor Vergés; Marta, Alicia y Pablo Gómez Trénor Aguilar; y su sobrino nieto Gonzalo Gómez-Trénor Larios.

La joya de la corona del patrimonio es el 8,5% de la mayor embotelladora de Coca-Cola independiente de la matriz de Atlanta, la europea Coca-Cola European Partner, fruto de una sucesión de fusiones que se empezó a negociar en 2013. Además, la sociedad Ecivsa es accionista de referencia de Ebro Foods (antigua Puleva), donde controla el 7,1% de la compañía alimentaria líder en España en el sector del arroz y las pastas con marcas como Sos, La Cigala, Brillante o La Fallera.

La fortuna se completa con múltiples inversiones inmobiliarias y productivas relevantes de distinto tipo, pero no de tanta envergadura como lo son las dos primeras. En total, un patrimonio estimado por la lista Forbes en más de 2.300 millones de euros, aunque distintas fuentes advierten que la cifra podría ser muy superior si no se tuviera en cuenta su valor contable sino lo que estarían dispuestos a pagar unos potenciales compradores.