![Juan y Hortensia: la aventura de crear](https://s3.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/2024/09/28/Imagen%2088872499-RnmEWC3pBEy5g3iKWB2LVZK-1200x840@Las%20Provincias.jpg)
![Juan y Hortensia: la aventura de crear](https://s3.ppllstatics.com/lasprovincias/www/multimedia/2024/09/28/Imagen%2088872499-RnmEWC3pBEy5g3iKWB2LVZK-1200x840@Las%20Provincias.jpg)
Secciones
Servicios
Destacamos
Cuando Juan Roig Alfonso vino a nacer, el 8 de octubre de 1949, toda la huerta, desde Tránsitos hasta Massamagrell, estaba peleando contra los brutales efectos de la riada del Turia y el Carraixet. La inundación, que se desencadenó el 28 de septiembre, causó tanto daño en pueblos y pedanías como en la propia ciudad, donde arrasó cientos de chabolas asentadas en el cauce del río. La alquería de Poble Nou, rodeada esos días de los ecos pesimistas de una catástrofe, fue testigo del nacimiento del sexto hijo de Trinidad Alfonso y Francisco Roig, don Paco el Porquero.
Setenta y cinco años ya. De aquella tremenda inundación y de la vida de un empresario que, en estos momentos, además de un referente en el mundo de los negocios, es no sólo el valenciano dotado de mayor poder de decisión y patrimonio, sino el de mayor influencia y capacidad de convocatoria.
–Nos hemos pasado treinta pueblos como país…
Noticia relacionada
Francisco Pérez Puche
La prensa, al menos una vez al año, se congrega en las ruedas de prensa del CEO de Mercadona y está atenta a sus frases; que se proyectan, contundentes como proyectiles, con vocación de portada. Esta, la que vino a resumir la crisis y el cataclismo bancario posterior, es del año 2012. Pero ya en 2010 podemos ver a Roig ante un enorme rótulo que pregona 'Cultura del esfuerzo', un lema que no está claro si pasó de la empresa al baloncesto o si hizo el camino a la inversa… Pero que define un estilo, un modo de ser, pensar y actuar. Una filosofía de vida.
–Esto no es un problema ni de políticos, ni de sindicatos, ni de empresarios, es a nivel global y, o pegamos un cambio y nos hacemos conscientes de que estamos por arriba de nuestro nivel de productividad, o nos van a intervenir…
Esta frase fue la segunda parte del «Nos hemos pasado». Y escondía la reflexión y la recomendación. El tratamiento, la medicina. Que podría tener aire de moralina o de picante posición política. Pero que, en el contexto de 2012, fue una bomba atómica que recogió la prensa económica internacional. Quizá fue entonces cuando Juan Roig, que ya había sobrepasado los 60, trascendió el ámbito de lo valenciano y se proyectó en la escena nacional. Era un empresario rico, que había creado un imperio de la distribución a partir de unas pocas tiendas familiares. Pero ¿cómo es este hombre?
A lo mejor, tendríamos que haber preguntado a su primer maestro, don Juan Cifuentes, que le enseñó a leer y escribir. O al cura párroco de la pedanía, don Rafael. Si de verdad se quieren buscar las claves íntimas, los resortes de su carácter y estilo, quizá habría que ir a los días de libertad infantil en la huerta; o en los juegos con sus hermanos, sobre todo con Fernando y Trini. O evocar a Vicente, que murió tan pronto. Se podrían reconstruir las vacaciones familiares en los pinares de Manzanera, o en una masía si ese año había algún suspenso en los estudios. Porque luego, cuando la familia se trasladó a la ciudad, al piso grande de Martínez Cubells, el escenario cambió y el colegio fue el de los Jesuitas, donde Juan hizo la primera parte del bachillerato. Que tuvo una segunda parte, más realista y dura, diríase que más seria y exigente, como interno en los franciscanos de la Concepción en Ontinyent.
El Valencia, el fútbol y las tiendas. Vender y vivir el deporte. El Pamesa. 'Mercado de carnes para mayoristas Roig', dice el anuncio de 1970 publicado en estas mismas páginas. 'Aparcamiento y lavado del automóvil gratuitos', añade como gancho. Mercadona nació en 1977 y Juan Roig compró a sus padres la empresa en 1981. En 1988 asimiló las tiendas del grupo Superette. Pero ¿dónde están el impulso y el resorte?
¿Es el ejemplo de San Walton, y los Walmart de Arkansas? ¿Es quizá la filosofía de vida y trabajo de Stephen Covey? Conforme pasen los años, el secreto se irá desvelando. La clave, pienso yo, hay que buscarla en la facultad de Económicas, y en aquellos cinco años de estudios y noviazgo (1968-1973) que convirtieron a Juan Roig y Hortensia Herrero en una pareja sólida que decidió construir una familia e iniciar un proyecto de vida en el que tendría asiento la idea de construir una empresa. Medio siglo después, en el palacio de Valeriola, sede de la Fundación Hortensia Herrero, discretamente, cuelga un cuadro en el que los dos, tomados por la cintura, avanzan por un jardín. Se les ve de espaldas, pero se les identifica a la primera: es un acrílico de Luis Lonjedo hecho a partir de una foto que se tomó en 2016, cuando recibieron la medalla del Trabajo.
El cuadro, en medio de un mar imbatible de arte de vanguardia, es un mensaje. Es, al menos para mí, una clave que explica el secreto de una complicidad, íntima y personal, pero también profesional y pública; convertida en motor de vida, proyectos, negocios, creatividad y mecenazgo. El matrimonio tiene cuatro hijas que son futuro ya presente. Pero, además, como fruto de ese quehacer profesional compartido, hay una potente galaxia concebida a modo de economía circular: Mercadona, el baloncesto, el Maratón, AVE, los Santos Juanes, las fallas, Lanzadera, el Roig Arena, mil trescientas tiendas, las fundaciones, cien mil empleados, la Marina, el Centro de Arte… El empresario como creador. La aventura de idear, el disfrute de crear.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Equipo de Pantallas, Leticia Aróstegui, Oskar Belategui, Borja Crespo, Rosa Palo, Iker Cortés | Madrid, Boquerini, Carlos G. Fernández y Mikel Labastida
Jon Garay y Gonzalo de las Heras
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.