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La biofarmacéutica PharmaMar vive un momento dulce. Después de registrar unas leves pérdidas en 2019 confirmó en 2020 un buen comportamiento pese al impacto ... del coronavirus que le reportó beneficios de 137 millones. Su presidente afronta con optimismo el futuro y tiene esperanzas de que no solo los antitumorales y remedios contra el cáncer tiren del carro de la firma sino también un medicamento contra el Covid-19 que está en su fase final de laboratorio.
–¿Cómo avanza el ensayo clínico del Aplidin para la lucha contra el coronavirus?
–La fase tres ya ha empezado y se han reclutado pacientes para ello. Nosotros tenemos la estimación de poder concluir el estudio antes de terminar el ejercicio 2021. En España ahora mismo hay abiertos 18 puntos en hospitales y también hay en Francia o Inglaterra. Por la incidencia que está teniendo el virus estamos muy pendientes de Sudamérica, en pleno invierno.
–¿Los kits de diagnóstico de la empresa han funcionado bien?
–Nuestra filial Genómica cuenta con test PCR, antígenos y anticuerpos. Es necesario señalar que este último sirve para no sólo para detectar si has pasado el virus sino también si te ha hecho efecto la vacuna, algo que no lo hacen muchos productos del mercado. Estamos muy satisfechos por su fiabilidad y resultados. Además, tenemos test que detectan otros virus y bacterias que producen síntomas similares al Covid-19.
–¿Cómo ha afectado la pandemia al negocio de PharmaMar más allá de estos productos? Se habla de muy buenos resultados.
–Respecto al funcionamiento no nos afectó al estar dentro del sector sanitario si bien se establecieron controles mensuales con pruebas. Por otra parte, en 2020 hemos logrado unos resultados récord porque las ventas e investigación en cáncer han ido muy bien.
–¿No ha notado la compañía que se hayan dejado de hacer tratamientos con vuestros productos al centrarse el sistema sanitario en el coronavirus?
–A nosotros es algo que no nos ha afectado. Los ensayos clínicos se han seguido realizando y los tratamientos también. De hecho, hemos seguido vendiendo gracias a que los antitumorales de PharmaMar suelen ser una infusión intravenosa administrada cada tres semanas mientras que otros requieren ir semanalmente al hospital, lo que ha afectado a los competidores. Se han revalorizado nuestro productos y nos ha afectado la pandemia en el sentido positivo.
–¿A qué se han debido las irregularidades de las acciones de PharmaMar en bolsa?
–En la bolsa sucede eso a veces, se sube y se baja. Son incluso movimientos que no tienen por qué tener en cuenta la marcha de la empresa. Aún así, es necesario destacar que la volatilidad se ha reducido un tercio en el último año y esto es algo reseñable. Pero pese a todo siempre hay mucho movimientos
–¿Cuáles son los principales proyectos futuros de la farmacéutica? ¿Se continuará creciendo?
–Nosotros pensamos que hemos alcanzado un nivel en el que va a haber bastante estabilidad, también en el dividendo. Estamos en un sector que dependemos mucho de los resultados de la investigación porque la apuesta es muy fuerte pero en este campo nunca sabes cuál va a ser el final. Debido a eso hemos decidido hacer una apuesta por ensayos clínicos de fase tres, la última antes de salir al mercado. Tenemos análisis de medicamentos de cáncer de pulmón, mesiotelioma, Covid-19 y el síndrome del ojo seco. Son cuatro frentes importantes y costosos pero esperamos que la mayoría sean positivos, lo que nos daría un mercado adicional.
–¿Cómo se desarrollan el resto de ensayos clínicos?
–En PharmaMar tenemos la suerte de haber apostado por la investigación de fármacos de origen marino y estamos descubriendo campos muy novedosos con indicaciones para los que nadie había encontrado nada antes. Es el caso de la lurbinectedina y otros muchos ensayos van encaminados a analizar sus posibles aplicaciones. Precisamente en el mar es donde más virus hay y había que profundizar en este campo. Ahora tenemos también dinero y vamos a apostar fuerte.
–¿Prevé la compañía aumentar su plantilla en el corto plazo?
–Ahora mismo contamos con unos 350 trabajadores pero a raíz del tema del coronavirus hemos creado una unidad a la que hemos incorporado expertos. De forma paralela crecemos en el campo del cáncer y prevemos fichar a más personas. Las nuevas instalaciones tienen una capacidad de 90 nuevos puestos de trabajo que no se van a crear de golpe pero sí que se espera que se completen poco a poco.
–¿Qué papel juega la Comunitat Valenciana para la empresa?
–La relación con la Comunitat Valenciana ha existido desde el principio. Ahora mismo tenemos ensayos clínicos oncológicos en varios hospitales pero nuestra relación va más allá ya que tenemos muchos inversores desde el primer momento.
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