El ministerio reconoce que la prohibición de plaguicidas crea graves problemas agrícolas

El Ministerio de Agricultura ha reconocido que «la actual situación de prohibición de productos fitosanitarios está ocasionando en nuestra agricultura la aparición de nuevos problemas derivados de la falta de soluciones».

Con este enunciado, tan claro y rotundo, que encabeza una resolución de autorización excepcional de un insecticida, el ministerio viene a coincidir, por fin, con los agricultores de toda España que desde hace años reiteran sus quejas por la falta de productos fitosanitarios con los que combatir de forma eficaz las plagas que diezman sus cosechas.

La Dirección General de Sanidad de la Producción Agroalimentaria y Bienestar Animal hizo pública el pasado día 13 una 'Resolución de autorización excepcional' de un insecticida que estaba vedado para su uso en cítricos. Se refiere a los formulados a base de 'Spinosad 48%' (no confundir con otro producto con la misma sustancia pero de menor graduación para su empleo en pulverización cebo contra la mosca Ceratitis).

En este caso, la autorización excepcional viene motivada por la necesidad de contar con suficientes herramientas para luchar contra el 'Scirtothrips aurantii' (trips de Sudáfrica), el 'Scirtothrips dorsalis' y el 'Chaetanaphothrips orchidii' (trips de la orquídea). Una situación de precariedad de medios que obligó a que la Conselleria de Agricultura solicitara permiso extraordinario para algunas materias activas no permitidas, tal como se concede para el citado Spinosad, mientras se esperan decisiones iguales para otros productos que amplíen el abanico de plaguicidas disponibles.

Tras reconocer que la prohibición de fitosanitarios incrementa los problemas, la referida resolución, firmada por el director general Valentín Almansa, argumenta que «las soluciones (insecticidas) actualmente registradas no permiten un control suficiente de las poblaciones» de dichas plagas, que además están catalogadas como de cuarentena, lo que implica la obligación de erradicarlas.

La solicitud de autorización excepcional fue presentada por la Comunitat Valenciana, Murcia y Andalucía. Para la Comunitat Valenciana, el calendario permitido de comercialización y uso de 'Spinosad' 48% es el siguiente: en naranjo, mandarino y pomelo, del 31 de marzo al 28 de junio y del 21 de julio al 19 de agosto próximos; en limonero, del 1 de abril al 15 de junio y del 18 de octubre al 30 de noviembre.

La autorización abarca también los cultivos de caquis y granados, que se ven igualmente afectados por los trips.

La dosis máxima permitida es de 0,25 litros de producto por hectárea, con un consumo de caldo (agua con insecticida) de 2.500-3.000 litros por hectárea. El plazo de seguridad es de 7 días tras el tratamiento.

Este procedimiento de mantener prohibidos unos fitosanitarios, para luego recurrir a conceder autorizaciones excepcionales si es preciso, está siendo cuestionado por agricultores y técnicos experimentados, pues cada vez se implanta más esta forma de actuar, con lo que se genera una constante incertidumbre, porque no se conoce con tiempo si se dispondrá o no de esto o aquello, se obliga a permanecer pendientes de pasos burocráticos que complican la gestión agronómica, y a buen seguro se propicia encima un encarecimiento de los productos, por la precariedad de plazos y la urgencia en producirlos y distribuirlos para periodos cortos. ¿Cómo se paga lo que sobra, una vez culminado el periodo permitido? Sin duda, incrementando el precio de lo que se logra vender.

La presidenta de la Comisión Europea, Úrsula von der Leyen, ha ofrecido nuevas ayudas a Sudáfrica durante la cumbre entre ambas partes celebrada en El Cabo. Los principales acuerdos se traducen en un paquete de ayudas de 4.700 millones de euros y el inicio de conversaciones para una «asociación de comercio e inversión limpios» que se centrará en el desarrollo de «industrias estratégicas a lo largo de todas las cadenas de suministro», donde es fácil imaginar que se incluyen las actividades de producción y exportación agroalimentaria, cítricos por supuesto. Es decir, nada de frenar importaciones, sino más puertas abiertas. Esa es la voluntad política, y sin oposición. Háganse el ánimo.