El AVE de Air Nostrum y Acciona competirá con Renfe en toda la red de alta velocidad

valencia. Acciona va «a por todo» en el mercado de transporte de viajeros en tren de alta velocidad y pretende competir con Renfe en toda la red de AVE, ante la próxima liberalización del negocio en diciembre de 2020. Lo hará a través de la alianza alcanzada con los propietarios de Air Nostrum para sacar adelante su empresa privada de trenes de alta velocidad, Ilsa, en la que el grupo que preside José Manuel Entrecanales controla cerca del 70% del capital social. El resto sigue en manos del presidente y máximo accionista de la aerolínea valenciana, Carlos Bertomeu, sus socios y fundadores de IVI, José Remohí y Juan Pellicer, y el directivo Victor Bañeres.

«Nuestra intención es abarcarlo todo», aseguró ayer el director del negocio de servicios ferroviarios de Acciona, Fernando García Alonso, durante una jornada sobre la liberalización del sector organizada por IE Business School, en presencia del presidente de Renfe, Isaías Táboas.

Fuentes de Air Nostrum, por su parte, trasladaron a LAS PROVINCIAS que comparten «completamente la visión de Acciona, como no podía ser de otra manera».

García Alonso afirmó en esa jornada que la línea AVE Madrid-Barcelona, en la que ya cuentan con autorización para operar de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia, es «la que más atractivo y potencial» presenta para entrar a competir con Renfe.

Se trata de una ruta en la que, además de ser «la que más tránsito de viajeros registra del país, aún tienen mucha cuota de mercado el avión y el coche particular». Al respecto, apuntó que el tren puede aún 'robar' la circulación de 1.500 vehículos privados al día en esta conexión entre la capital y la ciudad condal.

No obstante, el responsable del negocio ferroviario de Acciona avanzó que sus planes en este ámbito van más allá. Según dijo, la intención del grupo es «abarcar toda» la red de alta velocidad de casi 3.000 kilómetros de longitud, la segunda mayor del mundo, con una «gestión integral de transporte y movilidad».

Acciona se convirtió recientemente en operador ferroviario al tomar alrededor del 70% del capital social de Ilsa, la firma constituida por los socios de Air Nostrum para poner en marcha un AVE privado y que cuenta con autorización para dar servicio ferroviario. En concreto, Ilsa tiene luz verde para explotar un servicio internacional -ya liberalizados-: la conexión entre Madrid y Montpellier, que incluye el trayecto entre Madrid y Barcelona.

Hasta la fecha la firma no ha podido comenzar a dar este servicio por las dificultades a la hora de alquilar trenes AVE a Renfe. Según se expuso durante la jornada, Ilsa «no descarta aún» entrar a competir con Renfe antes de diciembre del año que viene, aunque lo ve difícil.

En la actualidad, Ilsa, además de buscar una marca comercial, «analiza distintas posibilidades» para hacerse con un parque de trenes, desde su compra hasta su alquiler, mientras en paralelo asegura recibir muestras de interés de otros inversores por entrar en el proyecto.

Durante su intervención, el directivo de Acciona descartó el planteamiento de Renfe de que la entrada de competencia vaya a restar viajeros e ingresos a la operadora pública. «La tarta se hará más grande, habrá más viajeros para que las cuentas del operador actual y de los nuevos sean positivas», aseguró el director de servicios ferroviarios de Acciona que, no obstante, reclamó una «regulación que garantice la libre competencia y la generación de inversión y empleo».

En su opinión, los nuevos operadores deben ofrecer un servicio «económico, y con más frecuencias y horarios», y que, además de garantizar la sostenibilidad ambiental y la seguridad, sea intermodal, es decir, que conecte con otros modos de transporte, entre los que subrayó la importancia de enlazar con los principales aeropuertos.

Además, desde Acciona defendieron la necesidad de que sea un servicio «vivible», que se adapte a las necesidades de cada tipo de viajero, tanto del que tome un tren por negocios, como del que lo haga en familia o por ocio, de los 'millennials' a los más mayores.

«La liberalización del transporte en tren es una herramienta necesaria para la movilidad futura de los usuarios», asegura el grupo de construcción y energías renovables, que enmarca en su estrategia de negocios sostenibles su entrada en este sector, de la mano de los propietarios de Air Nostrum.

El grupo mantiene que refuerza su actividad relacionada con el ferrocarril más allá de la construcción de líneas. Cuando en 2005 se liberalizó el transporte de carga en tren, lanzó una filial ferroviaria de tráfico de mercancías y, en los últimos años, ha sido uno de los principales suministradores de electricidad a la red AVE, y energía 100% renovable, según recalcan desde la empresa.