Air Nostrum consigue vía libre para su AVE entre Madrid, Barcelona y Francia

El AVE privado de los socios de Air Nostrum ve la luz al final del túnel. Tras un año de paralización del proceso administrativo, las reservas del Ministerio de Fomento y la resistencia de Renfe, la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) ha dado el visto bueno al que será el primer servicio ferroviario de Alta Velocidad privado que operará en España.

El proyecto se ha promovido a través de la sociedad Ilsa, controlada por los accionistas de Air Nostrum Carlos Bertomeu y los fundadores de IVI, José Remohí y Juan Pellicer; pero que se enfrenta ahora a la necesidad de dar paso a nuevos socios que le permitan contar con más capital y disponer de conocimiento sobre un negocio que no es el suyo. Fuentes conocedoras de la operación aseguran que las negociaciones están muy avanzadas y en breve se prevé disponer de esos compañeros de viaje.

Su proyecto es una conexión internacional entre Madrid y Montpellier, pasando por Barcelona. Este último aspecto es la clave de la operación, ya que significa entrar directamente en el negocio de Renfe, pese a su aguante. De hecho, la legislación comunitaria obliga a la liberalización del mercado internacional europeo desde hace años (aunque en España no se haya practicado), siendo inesquivable 2020, cuando se extiende la obligación a trayectos nacional.

En todo caso, la decisión de la CNMC no significa que el servicio se tenga que poner en marcha desde ya, porque aún está pendiente de un trámite la solicitud de intervención que la compañía ha elevado a la CNMC para poder utilizar trenes de Renfe. Se trata de unidades de los AVE más antiguos de Renfe, los S-100 de Alstom que la compañía compró para el AVE a Sevilla, y que Air Nostrum pretende utilizar a través de la filial Renfe Alquiler.

En todo caso, la resolución tumba las reservas que se planteaban al proyecto por ser poco internacional, al discurrir en un 80% por España y sólo un 20% por territorio francés, el mínimo establecido por las directivas europeas para considerar un tráfico como interestatal. El regulador asegura también haber constatado que al menos el 30% de los viajeros del AVE Madrid-Montpellier de Air Nostrum realizarán trayectos entre los dos países. Asimismo, Ilsa asegura que limitará la venta de billetes nacionales en el caso de que superen el 70% establecido.

La decisión llega de que el pasado mes de mayo la compañía ferroviaria alemana Deutsche Bahn, a través de su filial Arriva, le cursara también una solicitud para entrar a operar transporte de viajeros en tren en España. En concreto, este servicio de Arriva contempla paradas en las estaciones de A Coruña, Santiago de Compostela, Pontevedra y Vigo Guixar, en cuanto al territorio español se refiere. De esta forma, ofrecerá servicios entre estas ciudades gallegas alternativos a los de Renfe. Una vez fijadas las reglas, se espera que los aspirantes aumenten.