El Puerto de Valencia aprueba la ampliación de la nueva terminal

El Consejo de Administración de la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) ha dado el primer paso para hacer realidad la ambiciosa terminal de la ampliación norte, que tendrá capacidad para cinco millones de contenedores. «Estamos ante la decisión más importante en términos económicos para el Puerto y para la Comunitat en su conjunto. Vamos a pasar de un puerto de siete millones de contenedores a uno de 12 millones, lo que nos situará como el tercero de Europa», ha afirmado el presidente de la APV, Aurelio Martínez, tras la reunión del Consejo de Administración.

En concreto, la APV ha aprobado el pliego de las bases del concurso para la construcción y explotación de la nueva terminal, así como el pliego de condiciones generales y particulares de la concesión. La inversión de la obra está estimada en 1.200 millones de euros, de los cuales, un total de 400 millones serán sufragados por la autoridad portuaria.

La terminal contará con dos kilómetros de línea de atraque y 700 metros de anchura, lo que le permitirá acoger los denominados mega buques. «La ampliación tiene el doble de tamaño que toda la ZAL», ha apostillado Martínez sobre la nueva instalación de 137 hectáreas. Otras de las exigencias del pliego son que deberá ser una terminal 100% automatizada y que cuente con una estación ferroviaria, además de utilizar energías limpias para su funcionamiento.

El director general de la APV, Francesc Sánchez, ha explicado que el Puerto tendría un problema grave de capacidad en los próximos seis o siete años en el caso de que continuara con las instalaciones actuales. «Es evidente que el Puerto con las instancias actuales tendría un problema. Hablamos de una terminal para las próximas décadas», ha afirmado.

En cuanto a la terminal mínima que se pueda ofertar, los concursantes podrán ofrecer el tamaño que se acople a su plan de negocio siempre y cuando sea mínimo de 800 metros de línea de atraque y 49 hectáreas. Del mismo modo, se admiten desarrollos por fases hasta ocupar el 100% del muelle. Esta segunda opción es la que Martínez considera, en su opinión personal, como la más lógica.

Por lo que respecta a la posibilidad de que se presente un operador que ya está en el Puerto, Sánchez ha explicado podrá hacerlo pero con una serie de condiciones: «Exigimos que si uno es titular de una concesión puede presentarse al concurso, pero su proyecto tiene que garantizar un 50% más de capacidad de la que ocupa actualmente y debería dejar la concesión anterior». En concreto, el plazo de concesión en la nueva terminal oscilará entre los 35 y 50 años, dependiendo de si la propuesta es de ocupación parcial o total.

Por último, uno de los requisitos principales para optar al concurso es tener experiencia en gestionar terminales con movimientos superiores al millón de contenedores anuales y disponer de una solvencia económica para afrontar inversiones que pueden superar los 700 millones de euros.