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ELISABETH RODRIGUEZ
Miércoles, 23 de enero 2019
El Puerto de Valencia pisa el acelerador para acometer el acceso norte, así como la ampliación norte del recinto, dos obras paralelas que son cruciales para la continuidad y el buen funcionamiento del enclave portuario. Ayer, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, confirmó que la Autoridad Portuaria de Valencia (APV) y el Ministerio de Fomento construirán finalmente un túnel bajo el mar para ejecutar el acceso norte, una alternativa que llevaba meses sobre la mesa de negociación de las administraciones pero que, hasta ahora, no se ha materializado en forma de acuerdo. En ese sentido, Puig aseguró que, en breve, se procederá a la firma de un protocolo entre el Ministerio de Fomento, la Autoridad Portuaria de Valencia y la Generalitat.
«Esta es la solución que compartimos desde la Generalitat, el túnel subterráneo, por el mar, ya que evitará mayores problemas en el ámbito urbano y en la propia huerta, además de situaciones que se dieron en el pasado respecto al entorno ambiental», manifestó Puig tras reunirse con el presidente de la APV, Aurelio Martínez.
La obra tendrá un coste de 400 millones de euros en total, de los cuales, la mitad los invertirá el Puerto y la otra corresponderá a la cartera del ministro valenciano José Luis Ábalos. Cabe recordar que el acceso norte es una reivindicación histórica de la autoridad portuaria, debido a la congestión de tráfico que ya sufren los transportistas en la única entrada actual al recinto del Grao.
Según Martínez, las previsiones de crecimiento del tráfico en los próximos años urgen las obras de la ampliación de la terminal norte como las de este acceso. En concreto, las tasas de crecimiento anual son del 5%, por lo que en diez años circularán 3.000 camiones más al día, llegando a un total de 9.000 diarios.
Por lo que respecta a plazos, la APV indica que el acceso norte tendrá que estar listo antes de la ampliación, ya que es necesario para la puesta en marcha de la nueva terminal, que se conectará con Sagunto a través de este túnel submarino que comenzaría por Port Saplaya. Por ello, las obras de ambas infraestructuras se harán de manera paralela y se estima que estén acabadas dentro de entre seis y ocho años.
Otra de las cuestiones abordadas fue la puesta en marcha de Parc Sagunt II. Los 31 millones de euros que ha ingresado la APV tras vender su parcela en Parc Sagunt a una multinacional española se destinarán al avance de la segunda fase.
Por otro lado, en febrero se licitarán las parcelas de la ZAL para que se pongan en marcha en abril. Puig aseguró que esta plataforma logística creará 2.000 empleos y que se tendrá preferencia por los desempleados de Nazaret.
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