Los Reyes regresaron este miércoles a Valencia. Era la sexta vez que lo hacían desde que el pasado 29 de octubre la dana arrasase ... con todo lo que encontrase a su paso en más de 70 municipios de la provincia. Sin embargo, esta vez el propósito de los monarcas no era únicamente volver a mostrar su apoyo a la región, como quedó reflejado en el libro de honor de la Confederación Empresarial de la Comunitat Valenciana (CEV) con un mensaje en el que Felipe VI y Letizia animaban a los valencianos a seguir aunando esfuerzos con «la ilusión y la esperanza de seguir construyendo un gran futuro para las comarcas y los municipios dañados», sino también repasar cómo avanza la reconstrucción de la zona cero de la mano del sector empresarial y de los agentes sociales e incluso poner el foco en el futuro a medio plazo para evitar que una nueva catástrofe tenga unas consecuencias similares a las de la dana que asoló la provincia de Valencia hace ya más de cuatro meses.
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De hecho, el mensaje que la Casa Real transmitieron al sector empresarial fue en esa línea. Tal y como explicó el presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, tras una reunión de más de dos horas de duración, los Reyes hicieron hincapié en la idea de que «aquí no sólo hay que hablar de arreglar los temas, sino que también hay que ver cómo cambiamos las cosas». Es decir, incluir en el proceso de reconstrucción medidas preventivas para impedir que la historia se repita.
Fue «el reto» que los monarcas propusieron no solo a los representantes del empresariado, representados por miembros de la Fundación CEOE, el Consejo de Cámaras de la Comunitat Valenciana, AVE, Femeval, Confecomerç, ATA, Conhostur, Unespa y la Asociación Española de Banca, sino también a los agentes sociales, con quienes mantuvieron un encuentro de una duración similar en el que doña Letizia volvió a mostrar su faceta más empática con los colectivos minoritarios y Felipe VI se mostró sabedor de la importancia que puede tener la salud mental en un proceso de reconstrucción como el que está teniendo lugar en la zona afectada por la riada.
Cuatro horas fueron suficientes para que los monarcas repasasen los avances que se han llevado a cabo tanto en materia empresarial como social durante las últimas semanas. La jornada arrancó con puntualidad. La agenda marcaba que don Felipe y doña Letizia llegaban a la sede de la CEV a las 11:45 horas y así sucedió. Ni un minuto antes, ni uno después. Allí aguardaba un ejército de seguridades de Casa Real y otro de jóvenes universitarios que dieron una cálida bienvenida a los monarcas, que también fueron recibidos por el ministro de Economía, Carlos Cuerpo; el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón; el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales, Antonio Garamendi; y el presidente de la CEV, Salvador Navarro.
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Los vítores, aplausos y piropos que recibieron los monarcas a su llegada se contrapusieron con el silencio absoluto que reinó en la plaza Comte de Carlet cuando apareció el vehículo oficial que llevaba a Mazón, que a su salida, en torno a las 15:45 horas sí que tuvo que escuchar algún que otro grito pidiendo su dimisión.
Fue el único incidente en clave política de una jornada que se desarrolló con gran cordialidad entre los representantes de las distintas administraciones, como confesó Garamendi. «No sé si es porque estaban los Reyes o porque estábamos nosotros, pero han estado muy educados», comentaba el presidente de la patronal en la rueda de prensa posterior a una reunión en la que precisamente esa fue la principal reclamación de los empresarios: mejorar la coordinación entre administraciones y rebajar el clima actual de crispación política.
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«El debate debe ser ayudar a las personas que lo necesitan en este momento», comentó Garamendi. En ese sentido, Navarro explicó que el sector empresarial valenciano le hizo entrega a la Casa Real de un informe detallado con la situación actual en la que se encuentran las zonas más afectadas. Aceptando el reto propuesto por los monarcas de ir más allá de la reconstrucción y mirar hacia el futuro, el presidente de la CEV propuso un aumento de la inversión en infraestructuras hídricas para evitar una tragedia de magnitudes similares. Navarro instó a la Administración a elaborar un pacto de Estado para mejorar la red de infraestructuras hídricas a nivel nacional. «Las inversiones en infraestructuras hídricas tienen que ser una cuestión de pacto de Estado. En este caso, lo ocurrido en el barranco del Poyo demuestra que tiene que haber inversiones adecuadas y planificadas en tiempo y forma», indicó el también vicepresidente de la CEOE.
En el apartado de propuestas, los empresarios también demandaron una mayor agilidad en el pago de ayudas e indemnizaciones, una estrategia de sensibilización e impulso del turismo hacia la Comunitat e incluso una revisión de los protocolos de emergencias.
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Ese último punto fue uno de los muchos que se trataron en la reunión que los monarcas mantuvieron con diferentes entidades sociales implicadas en el proceso de reconstrucción antes de regresar a Madrid. Desde el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI), una de las doce organizaciones participantes, desvelaron que la reina Letizia portó la iniciativa en el encuentro e incluso puso encima de la mesa propuestas como la puesta en marcha de una asignatura escolar que permita al alumnado «aprender educación para la salud, para el bienestar y para la gestión de situaciones de emergencia».
Cabe recordar que la primera visita de los Reyes a la zona cero de la dana se produjo el 3 de noviembre en Paiporta, donde se registraron incidentes por parte de varias personas que les increparon y lanzaron barro. Desde ese momento, los monarcas han tendido su mano a los afectados y se han acercado a los municipios arrasados hasta en otras cuatro ocasiones más previas a la de este miércoles.
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El 12 de noviembre, Felipe volvió a Valencia para visitar las unidades militares desplegadas en la zona de Bétera y una semana después los reyes visitaron Chiva y Utiel, ya sin ningún incidente. Asimismo, el pasado 9 de diciembre ambos acudieron al funeral organizado por el Arzobispado de Valencia en la catedral de la ciudad en memoria de las víctimas mortales de la dana y justo antes de Navidad, el 22 de diciembre, regresaron con sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía.
Además, Felipe y Letizia han mostrado en diversas ocasiones su apoyo a la región. La visita por sorpresa al estand de la Comunitat en Fitur 2025 fue una de las múltiples muestras de cariño que los monarcas han tenido con el territorio valenciano tras la catástrofe natural.
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