Powernauts: La aceleradora para personas con discapacidad

Prejuicios y estereotipos eran obstáculos que asumían que debían hacer frente en su día a día las personas con discapacidad. También, cómo no, para buscarse un trabajo. A esas trabas provocadas por el desconocimiento, se unió la crisis económica que azotó el mundo.

Poco a poco, la sociedad se muestra más sensible hacia las características particulares de este colectivo. Un ejemplo es la Fundación Prevent, entidad sin ánimo de lucro, privada e independiente cuyo objetivo principal es promover y contribuir a la inserción laboral de las personas con discapacidad.

Eva Florences, Coordinadora de los Programas de Emprendimiento y Discapacidad de esta organización, explica que fue en 2014 cuando se inició el programa que, posteriormente, se convertiría en Aprende y Emprende, el primer programa de emprendimiento destinado a personas con discapacidad.

'Aprende y Emprende' forma y acompaña a personas con discapacidad para poner en marcha su propio negocio. Tras cada edición otorgamos becas económicas de 5.000 euros a los 5 o 6 mejores proyectos, para sufragar esos primeros gastos de arranque, primeras cuotas, gastos de producto, registro y demás», comenta Florences, quien explica que tras unos años de experiencia detectaron algunas situaciones que se repetían: «Empezamos a ver que algunas de las iniciativas no terminaban de consolidarse y ser un proyecto de vida».

Según ODISMET, la tasa de paro entre las personas con discapacidad es del 25,2% Más de 10 puntos que las personas sin discapacidad. y la brecha salarial entre Personas con y sin discapacidad ha pasado del 10% en 2010 al 17,3% en 2018 (INE).

En este contexto, el autoempleo y el emprendimiento son alternativas elegidas por las personas con discapacidad como opción laboral. Durante 2019 el número de trabajadores autónomos con discapacidad aumentó un 5,4% hasta alcanzar los 22.694 (Cermi).

«Investigamos qué era lo que necesitaban porque no queríamos no responder a sus necesidades. Para nuestra sorpresa, no era inversión lo que nos reclamaban, si no apoyo. Así que empezamos a diseñar un programa de acuerdo con sus necesidades», añade la coordinadora. La pandemia aceleró sus intenciones: «Muchos emprendedores tuvieron que frenar su actividad, no estaban digitalizados y trabajaban con modelos antiguos que no se adaptaban a la nueva realidad».

En 2020 llegó la aceleradora Powernauts: «Pensamos en crear una aceleradora para ayudar a consolidar negocios que ya estaban puestos en marcha y darles el empujón definitivo. En aquel momento, no había en España ninguna. El formato es muy personalizado y es muy potente en recursos, es diferente». Con sede en Barcelona, y oficina en Madrid, en la fundación, están encantados a ayudar a cualquier persona con discapacidad, pero ¿cuál es el perfil de las personas a las que becan?, Florences lo explica: «Hay personas con discapacidad visual, con deficiencia auditiva, física, también personas con trastorno de salud mental». Llama la atención que, en la edición en curso, , de seis becados, cinco son mujeres: «Es un porcentaje que la verdad no es nada habitual».

Powernauts tiene dos fases. «En la primera se diagnostica las competencias emprendedoras de la persona y el negocio en un estudio 360 grados. Lo hacen profesionales en estrategia, finanzas, ventas, marketing, coaching, networking…,con el análisis se traza una hoja de ruta personalizada para los siguientes 6 meses. Los emprendedores, acompañados del equipo de expertos, trabajan esa hoja de ruta para que se cumplan los objetivos. Además de las 245 horas de asesoramiento, cuentan. con un fondo económico para -a criterio de los expertos- contratar servicios adicionales necesarios para el crecimiento y consolidación del negocio. Está muy enfocado .a mejorar y desarrollar la parte mas débil de cada uno de los negocios.

Pero el trabajo de la Fundación Prevent no termina ahí: «Todas las personas que pasan por aquí saben que siempre tienen la puerta abierta para recibir asesoramiento estamos a su disposición y en contacto con ellos en todo momento. Tratamos de generar comunidad, y apoyar a futuros emprendedores».

Estos emprendedores al final se convierten en referentes para otras personas con discapacidad: «Les pedimos que hagan de mentoring para otros, que hablen de su experiencia, de que es posible pero también que hay un trabajo duro detrás. El aprendizaje este no te lo da nadie, y su visión es importante». El objetivo es hablar de emprendimiento como un «camino alternativo» para acceder al mercado de trabajo, hablar del talento emprendedor que elimine barreras y estereotipos

«Hacer del autoempleo y emprendimiento una opción de vida para las personas con discapacidad», es el leitmotiv con el que Florences resume el propósito del proyecto del que forma parte.

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