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No todas las historias de startups son exitosas. A estas alturas eso lo sabe todo el mundo. Por eso, aquellas que consiguen despegar sin estrellarse ... se convierten en una inspiración para los emprendedores que buscan lanzar su proyecto. En ese grupo de buenos ejemplos se encuentra la valenciana Fourvenues, que en tan solo cuatro años ha conseguido crear una cartera de más de 300 clientes y tener presencia en cinco países. Pero, además, hace tan sólo un par de semanas anunciaba el logro de otra ronda de financiación que le permitirá seguir consolidándose en su sector: la gestión informática del ocio nocturno.
La firma que dirige Alberto Centeno como CEO ha seducido a inversores potentes. Y esto no es casualidad ni fruto de una operación arriesgada por parte de los que apuestan por la compañía valenciana. «Empezamos con un equipo de 9 personas y ahora somos 40, con una facturación de 35 millones de euros. Este crecimiento en clientes es lo que nos ha permitido cerrar esta última ronda de inversión», explica Centeno en referencia a los 6,5 millones de euros invertidos por el fondo estadounidense Base 10, con sede en Silicon Valley (Estados Unidos), y a la que se ha sumado Angels, la sociedad de inversión de Juan Roig, que ya apostó por la compañía en su anterior ronda.
Pero, ¿qué es lo que ha hecho posible este crecimiento? La respuesta se puede resumir en dos palabras: innovación y prudencia. «Hemos sido una empresa que hemos crecido poco a poco y no hemos hecho locuras con el dinero. Eso ayuda a que los inversores confíen en ti», agrega el emprendedor, que ahora tiene el foco puesto en expandirse en Europa y lanzar nuevos productos para que sus clientes aumenten la facturación. «Queremos crecer en producto y dar más servicio a nuestros clientes», explica.
Realmente, Fourvenues no las tenía todas consigo cuando la pandemia estalló y dejó al ocio nocturno tocado por las restricciones que se fueron prolongando más de un año después del confinamiento. «Con el Covid no teníamos dinero para aguantar tres meses sin facturar. Tuvimos la suerte de que en febrero estábamos hablando con un inversor canario y quiso invertir 50.000 euros para aguantar esos meses», destaca el empresario, quien asegura que llegaron al punto en el que el dinero en caja sólo daba para sobrevivir un mes más. «Esa inversión nos salvó», afirma.
Tal y como recuerda, nadie quería saber nada de ocio nocturno. «Pero través de Marina de Empresas conocí al director financiero de una empresa de venta de entradas que compró eBay y e cuestión de meses dijeron que querían invertir entre varios. Entonces ellos decidieron invertir 80.000 euros. Después de ellos llegaron también los canarios, que volvieron a invertir otros 50.000», narra el CEO. Así, se plantaron con una ronda de 250.000 euros con la que pudieron aguantar desde octubre de 2020 hasta finales de 2021, momento en el que se volvió a abrir el mercado.
Parte de su éxito radica en su capacidad para reaccionar rápido. «Nosotros durante la pandemia ya vimos que el ocio nocturno cambiaría con el Covid y nos anticipamos. Tiramos toda la plataforma con la que trabajábamos abajo. La hicimos de nuevo desde cero porque las bases del sector habían cambiado y además estaba diseñado para locales pequeños, por lo que vimos la necesidad de cambiar modelo de negocio para ofrecer servicios también a las grandes», cuenta.
La pandemia ha transformado el sector. Por ejemplo, la mayor parte de las entradas se pagaban en puerta mientras que ahora tiene gran protagonismo la venta online. «La labor de los relaciones públicas ya no consiste tanto en ir por la calle, sino moverse más por redes. Otro ejemplo es que todos los clientes llegan identificados con un QR», destaca Centeno.
Pero antes de dar ese vuelco a su propia tecnología con la que ofrecía un servicio de software a las empresas del ocio nocturno, Fourvenues ya llevaba unos años trabajando. No es una historia de éxito tras éxito, sino de saber adaptarse, reaccionar, innovar. «Estuvimos con Appear desarrollando un modelo diferente, pero en 2017 vimos que el negocio no iba como esperábamos, entonces buscamos alternativas», señala.
En aquel momento, estaban Alberto Centeno y Javi Gualde (actual CTO) al frente. Posteriormente ampliaron el equipo con Sergio Báguena (COO), Rubén Pérez (CPO). «Conocimos a Rubén en septiembre de 2017. Yo trabajaba en grupo Las Ánimas. Y nos llegó la app de Rubén para que los relaciones públicas tuvieran la gestión de las listas. Entonces hablamos con él para ver si podíamos usarlo y comisionar esas listas», concreta.
Se sentaron a hablar y de ahí surgió la revolucionaria sinergia. «Le propusimos conectarnos a su app como un relación pública más y poder apuntar las discotecas que tuviera como cliente. Ahí ya empezamos a trabajar juntos como si fuéramos colaborador de su empresa», prosigue. En enero de 2018 vieron que auella colaboración debía pasar a palabras mayores. «Tanto Sergio cómo Javi son programadores y pensamos que era buena idea juntarnos y buscar un inversor. A Rubén le pareció bien y en junio de 2018 lanzamos la primera versión conjunta», relata.
Tras ese 'sí, quiero', dejaron de lado la primera empresa y se embarcaron al 100% en Discocil, el software de gestión centrado en listas, Vips y RRPP. «Era una versión embrionaria de lo que tenemos hoy en día. Era muy inicial y a través de contactos del mundo de la noche empezamos a rodarla y decidimos ponemos a buscar inversión para hacer evolucionar la tecnología», señala. En 2019 ya empezaron a registrar en su caja esa mejora tecnológica, impulsada también por un cambio de tendencia en favor de las ventas online. Luego vino la pandemia. Y, el resto, es la historia de crecimiento sostenido que ahora les ha llevado a captar otra ronda millonaria de inversión.
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