Víctor Sanchís, CEO de V2C, durante una conferencia. V2C

V2C, la apuesta valenciana por la movilidad del futuro

La empresa cumple una década de desarrollo tecnológico en la industria de cargadores para vehículos eléctricos

Javier Gascó Pradas

Lunes, 22 de abril 2024, 19:49

Un grupo de ingenieros de la Universidad Politécnica de Valencia con ganas de emprender sentó, hace ya una década, las bases de lo que hoy ... en día es uno de los proyectos más sólidos del panorama de la movilidad eléctrica nacional. Su valiente apuesta por un sector, el de los cargadores de vehículos eléctricos, que entonces todavía no había tomado la relevancia con la que cuenta en la actualidad salió bien. La compañía V2C, asentada en Xirivella, acaba de lanzar el cargador Trydan Pro, un modelo diseñado para la venta comercial que permite una conectividad total incluso en zonas sin cobertura, después de haber generado 10 millones de ingresos durante el último año.

Publicidad

Pero detrás de esas cifras se esconde un crecimiento que, como es habitual, se dio de manera progresiva. De la idea de «desarrollar tecnología en el sector» comenzaron a surgir «productos sencillos» que con el paso del tiempo «fueron evolucionando» mediante mecanismos de autofinanciación, como explica Víctor Sanchís, CEO de la empresa.

Poco a poco, V2C fue encontrando la fórmula para implantar mejoras no solo en el hardware de sus cargadores, sino también en los sistemas de software internos: «Todos nuestros productos disponen de wifi y de bluetooth, pero este nuevo modelo también incluye conexiones ethernet y una tecnología que permite la identificación de usuarios y la gestión de sus pagos de manera sencilla».

No obstante, la filosofía de la compañía sigue siendo la misma que llevó a estos valencianos a ganar varios premios de emprendimiento cuando todavía no contaban con una base económica potente a sus espaldas. «Siempre trabajamos para reinvertir todo y así no tener pérdida», explica Sanchís.

Publicidad

Pese al éxito cosechado durante estos años, los objetivos también siguen siendo similares a los que él y sus compañeros de carrera se marcaron al inicio de esta aventura: «La idea inicial era la de desarrollar una tecnología e-charger en Valencia. Ahora aspiramos a convertirnos en una empresa tecnológicamente avanzada para ayudar al sector de la automoción».

Por el momento, parecen estar consiguiéndolo, ya que la expansión internacional de V2C ha ido, al igual que sus ingresos, duplicándose año tras año. En la actualidad, la compañía valenciana cuenta con sedes en Portugal, Italia y Francia, además de la que se ubica en Xirivella. Su presencia también se ha extendido por todo el planeta. «Vendemos en muchos países, como Holanda, República Checa o Albania. En los más pequeños es más fácil penetrar, como es el caso de Rumanía», explica Sanchís.

Publicidad

El progreso internacional es otra de las cuestiones que la empresa se marca en rojo en su lista de objetivos. Aunque «llegar a más países y aumentar la cifra de facturación» son metas que Víctor Sanchís considera que deben ir de la mano con «un mayor crecimiento del mercado de vehículo eléctrico». Y no solo en beneficio propio, sino en beneficio del sector: «Si cada vez hay más empresas como nosotros, nos vamos desarrollando». Sea como sea, su sede se mantendrá en Valencia: «Creemos que aquí se pueden hacer grandes cosas».

Respecto al avance de la movilidad eléctrica, Sanchís justifica que «requiere su tiempo», aunque centra sus deseos en que la utilización de los vehículos de este tipo «crezca un 30 o un 40% en todos los países» durante los próximos años. «Ya dijimos que el coche eléctrico era el coche del futuro, pero todo tiempo necesita una transición», considera el CEO de V2C, quien también cree que todavía existen «varios inconvenientes» para la adquisición de estos modelos, como el precio de compra, la autonomía de los propios vehículos o la infraestructura de carga, mermada por las trabas burocráticas.

Publicidad

En ese sentido, Víctor Sanchís explica que su compañía apenas se ve afectada por este tipo de cuestiones: «Nosotros lo notamos mucho menos, aunque el despliegue de carga acual que hay en España hace cuatro años era inexistente. Cada vez la carga es más posible».

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete a Las Provincias: 3 meses por 1€

Publicidad