Cómo cobrar el Ingreso Mínimo Vital y la Ayuda Familiar del SEPE a la vez

La situación económica actual es muy delicada. Como consecuencia del conflicto entre Rusia y Ucrania aumentó la inflación y, en consecuencia, los precios. Esto ha obligado a muchas familias a apretarse el cinturón, mirando los precios más baratos en los supermercados o en gasolineras. Hay muchas personas que se encuentran cobrando el Ingreso Mínimo Vital y muchas otras en una situación de desempleo y perciben una ayuda del SEPE. Para ellos, la difilcutad se multiplica.

Pese a que en principio no es posible cobrar dos prestaciones a la vez de organismos diferentes, existen algunas excepciones en las que un trabajador con cargas familiares sí puede percibir dos prestaciones a la vez, como puedan ser el Ingreso Mínimo Vital y la Ayuda Familiar del SEPE.

Para poder percibir ambas es necesario cumplir con una serie de requisitos requeridos desde el Gobierno para ayudar a las familias cuyos ingresos son muy bajos y no les da para alcanzar el umbral mínimo que establece el ejecutivo. De esta manera, aquellos trabajadores que tengan cargas familiares y que hayan perdido su empleo pueden solicitar una prestación al SEPE y, además, el Ingreso Mínimo Vital, siempre y cuando reúnan unas condiciones muy específicas: las del SEPE y las de la Seguridad Social.

En primer lugar, es necesario que al solicitar el IMV y la Ayuda Familiar del SEPE la suma de las cuantías no supere al 75% del Salario Mínimo Interprofesional. Es decir, que los 480 euros de la ayuda familiar más lo que corresponda de Ingreso Mínimo Vital no superen juntos los 750 euros al mes.

Los que pueden solicitar estas dos ayudas son aquellos que viven solos, un adulto con un menor a cargo o dos adultos sin un menor a cargo.

-Estar en desempleo o en una situación legal de desempleo.

- Ser demandante de empleo y suscribir el compromiso de actividad.

- Haber agotado el paro.

- Tener responsabilidades familiares, es decir, hijos menores de 26 años a cargo o mayores con discapacidad.

- Carecer de rentas superiores al 75% del Salario Mínimo Interprofesional al mes.

Edad comprendida entre los 23 y los 65 años. Los mayores de 18 años pueden si tienen hijos.

- Tener un año de residencia legal en España.

- En el caso de que la persona viva sola, denostar que se hacen desde hace tres años.

- Las unidades familiares deben estar constituidas desde un mínimo de seis meses.

- Demostrar que no se alcanza un límite de rentas y de patrimonio en función de la unidad de convivencia

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