El valenciano de la Coca-Cola

La familia Gómez-Trénor es atípica por muchas cosas. A parte de la pertenencia a una estirpe empresarial y aristocrática que ha marcado buena parte de los grandes hitos de la economía y la historia de la Comunitat, el caso de la rama de los Gómez-Trénor se ha visto acompañada por una gestión eficaz y una buena relación entre sus miembros que no han podido disfrutar otros famosos apellidos.

Los hombres clave en esta situación han sido Álvaro Gómez-Trénor Aguilar y Javier Gómez-Trénor Vergés, sobrinos de Juan Luis Gómez-Trénor Fos, la segunda mayor fortuna de la Comunitat Valenciana y una de las primeras de España hasta su fallecimiento en 2017. Su tío era soltero y décadas antes de su muerte implicó a sus dos sobrinos en las actividades de la firma que concentraba sus intereses económico, Empresas Comerciales e Industriales Valencianas (Ecivsa).

La pieza más relevante del patrimonio familiar son las 40,9 millones de acciones en Coca-Cola European Partners, un 8,7% del gigante continental que se dedica a embotellar las bebidas de la compañía norteamericana. Los Gómez-Trénor están vinculados a la empresa desde su llegada a España a mediados del siglo XX, al ser Juan Luis Gómez-Trénor fundador de la firma que envasaba en la costa Este de España (a excepción de Cataluña), Colebega.

Los americanos eligieron a los Gómez-Trénor y a la familia Usó para su establecimiento en Valencia y, en el caso de los Gómez-Trénor, estos aportaron capital, conexiones políticas (Juan Antonio Gómez-Trénor Fos, conde de Trénor, fue alcalde de Valencia de 1943 a 1947 y procurador en las Cortes franquistas entre 1943 y 1955) y su condición de comercializadores de cítricos, con lo que fundaron en 1963 la empresa Frusa, Fruta y zumo SA, que terminaría integrándose en Coca-Cola Iberia Partners en 2015, al ser la proveedora de zumos de Fanta y otras marcas de la compañía.

La buena marcha en la actualidad de la valenciana hizo que la empresa terminara siendo una de las claves de la fusión ordenada desde Atlanta, primero en la Península Ibérica y, a continuación, en Europa. Sin embargo, no se debe minusvalorar la relevancia del resto de inversiones, como su 7,8% en Ebro Foods, la propietaria de marcas como Arroz Sos, Brillante o la Fallera.

Siguiendo el proceso sucesorio, en septiembre de 2017, medio año después de la muerte del patriarca, Ecivca pasó a ser presidida por su sobrino Javier Gómez-Trénor Vergés, que ya ejercía de mano derecha de su tío los últimos años y que fue el administrador mancomunado de la sociedad, junto a Ignacio Muñoz, hasta que se completó el proceso.

Como vicepresidente quedó Álvaro Gómez-Trénor Aguilar, mientras que la secretaría del consejo de administración correspondió a su sobrina Caridad Lassala. Sin embargo, esta distribución de cargos no ha significado la imposición de una jerarquía en la familia, ya que el puesto en el consejo de Coca-Cola European Partners ha correspondido a Álvaro Gómez-Trénor, y en su nombramiento la compañía destacó su experiencia en la firma tras haber sido director de varias embotelladoras españolas.

Además, está actualmente en el consejo de administración de Olive Partners y es miembro de los consejos de Global Omnium (Aguas de Valencia) y Sinensis Seed Capital SCR de RC, sumando recientemente el ser representante de Coca-Cola European Partners en EDEM Escuela de Empresarios, el centro de formación superior impulsado por Juan Roig.

Por su parte, el consejo de administración de Ebro Foods comunicó que Javier Gómez-Trénor asumía el cargo de consejero en sustitución de su tío por unanimidad de los otros socios. La fortuna se completa con múltiples inversiones inmobiliarias e industrial relevantes de distinto tipo. La nueva generación toma el relevo de la fundacional del apellido Gómez-Trénor, ya que aquellos eran hijos de Francisco Gómez Fos y de María Trénor Despujol, hija de Enrique Trénor y Montesinos, conde de la Vallesa de Mandor.