La casa ideal para teletrabajar

Trabajar desde casa supone un ahorro frente a la alternativa de alquilar un despacho, evita desplazamientos y, en la situación excepcional que hemos vivido este año, ha habido momentos en los que se ha perfilado como la única opción para ciertas empresas y negocios. Sin embargo, la pandemia nos ha demostrado que el teletrabajo puede ser duro si no se dispone de un espacio cómodo, que fomente la productividad y que permita separar la vida laboral de la personal.

La gran mayoría de las personas que han teletrabajado durante estos meses ha deseado en algún momento disponer de una vivienda más grande. La amplitud es uno de los factores que más influyen en la comodidad de la vivienda en la que se teletrabaja. Incluso puede hacer plantearse si no merece la pena invertir en una vivienda más grande ahora que por otro lado uno se ahorra el alquiler de una oficina, o al menos, los gastos de desplazamiento.

Una casa amplia permite además disponer de un espacio para el trabajo separado del resto de la casa. Algo con lo que se ganará en productividad al tiempo que se evitarán distracciones. Y, no menos importante, ayudará a separar lo profesional de lo personal.

Una de las consecuencias del teletrabajo es que se reducen los momentos en los que se está fuera de casa y también las posibilidades de despejar la mente durante el día. Por esa razón, que la vivienda cuente con una terraza en la que poder realizar descansos al aire libre y tomar un respiro durante el trabajo es una característica cada vez más demandada. Del mismo modo, que la casa disponga de espacios agradables donde hacer un descanso o tomar un café irá en beneficio de la productividad durante el tiempo que se esté trabajando.

A la hora de elegir el espacio en el que se ubicará la zona de trabajo es importante que este sea independiente de las zonas comunes de la casa. De este modo las distracciones serán menores, especialmente si otras personas permanecen en la vivienda en horas de trabajo.

Una habitación independiente, a ser posible apartada del resto de la casa, es el espacio ideal. Además, de este modo se minimizan las opciones no solo de ser distraído por otras personas, sino también por pensamientos relacionados con lo doméstico, no con lo laboral.

Otras dos características son importantes a la hora de buscar la ubicación para el lugar de trabajo: la tranquilidad y la luz natural. Estos dos factores harán más agradable el teletrabajo, ayudarán a una mayor productividad e, incluso redundarán en la salud. Si además se trata de un espacio amplio, la sensación de comodidad será mayor.

Disponer de un espacio sin ruidos favorecerá la concentración y hará más fáciles las llamadas o reuniones telemáticas. La luz natural, por su parte, ayudará a mejorar el estado anímico además de permitir no tener que forzar la vista y emplear menos luz artificial, lo que a la vez supondrá un ahorro en la factura eléctrica.

Otra de las premisas que debe cumplir esta zona de trabajo es disponer de una buena cobertura telefónica y conexión a Internet, ya que el móvil y el ordenador son con seguridad nuestras dos principales herramientas de trabajo.

Cómodo, funcional, agradable y con un toque personal. Así debe ser el lugar de la vivienda destinado al teletrabajo, ya que se van a destinar muchas horas al día a esta labor. La elección de muebles en colores claros facilitará la concentración y evitará el cansancio visual. Si además esos muebles permiten una organización eficaz y cómoda, con la existencia de archivadores, cajones, estanterías y demás opciones para tener a mano y de forma ordenada lo que se necesita, el trabajo será mucho más fácil.

En cuanto a la decoración, lo ideal es que sea lo suficientemente discreta como para evitar distracciones, sin ser impersonal. Al fin y al cabo, son muchas las horas que se emplean en el trabajo, por lo que darle un toque propio ayudará a sentirse un poco más a gusto, sin caer en excesivos objetos que desvíen la atención.

Una buena iluminación artificial y una silla cómoda, regulable en altura y que se ajuste bien a la espalda son dos herramientas con las que se pueden evitar dolencias, por lo que juegan un papel muy importante a la hora de diseñar el espacio de trabajo en casa.

En definitiva, una vivienda amplia y con buena iluminación, que cuente con algún espacio independiente para ubicar la zona de trabajo, y que se decore de forma funcional y permanezca ordenada, es la ideal para teletrabajar de manera cómoda y productiva.