Dos adinerados vecinos europeos se lanzan a comprar viviendas en Valencia

La compra de vivienda por extranjeros se ha disparado en España y en especial en las zonas de costa. En 2019 compraron 63.000, en 2021 70.000 y en 2023 más de 87.000 viviendas, según un análisis realizado por Inmobiliarias Encuentro en base a los datos históricos de Registradores de la Propiedad. Y en la Comunitat Valenciana el aumento ha sido del 29%, un 20'81% más que en 2021, con un aumento significativo de la compra de propiedades desde dos países europeos con un alto poder adquisitivo que se han visto atraídos por la calidad de vida en el litoral español.

Las nacionalidades más habituales de compra de vivienda en España han sido tradicionalmente las de británicos y alemanes, aunque también de franceses y marroquíes. Sin embargo, en las zonas de costa se está produciendo un cambio significativo en el origen de los compradores.

Tradicionalmente los mayores inversores foráneos en vivienda en Valencia, Alicante y Castellón han sido los británicos, que siguen liderando el ranking, pero en los últimos años han ido perdiendo peso específico, pasando del más del 15% en 2019 al menos del 10% en 2023.

A continuación se sitúan dos vecinos europeos. Por un lado se sitúa Bélgica, que en los últimos años han representado entre el 8% y 9% de las operaciones, y también ha crecido exponencialmente la presencia de neerlandeses, procedentes de los Países Bajos, que se sitúan por primera vez en los últimos años como tercera nacionalidad que más ha comprado, superando el 7%. «Es algo que está pasando también en otras zonas como Andalucía. A los neerlandeses les gusta España y las zonas costeras. Tienen poder adquisitivo y están aprovechando para invertir en regiones que conocen y que se diferencian notablemente de sus lugares de origen», explica Carlos Almodóvar, director general de Inmobiliarias Encuentro, que cuenta con 25 oficinas en España y que fundamenta su actividad en el sector inmobiliario a través del desarrollo de servicios especializados de venta inmediata, nuda propiedad, venta de herencias, franquicias o inversión.

Países Bajos y Bélgica tienen numerosos aspectos en común. No son Luxemburgo, Suiza o Dinamarca, pero empiezan a tener un poder adquisitivo importante. Entre los dos estados apenas suman 72.000 m2, 7 veces menos que España, y su población conjunta (29'5 millones) es muy inferior a los 48 millones de nuestro país.

Pero lo que más destaca es su elevado nivel de vida. Mientras el salario mínimo en España es de 1.134 euros al mes (en 14 pagas), en Bélgica es de 1994 euros y en Países Bajos (antiguamente conocida como Holanda) supera los 2.070 €/mes. Y si ese es su SMI, el salario medio es más del doble que el de España: aquí no alcanza los 26.000 euros anuales mientras en Bélgica supera los 55.000 y llega a los 57.513 en Países Bajos. Apenas tienen paro y la esperanza media de vida en ambos países es de casi 82 años (81,7). Un motivo que invita a los belgas y neerlandeses a invertir su dinero en paraísos turísticos de España.

Tras ellos está Alemania, el cuarto país que más compra vivienda en España, con más del 6%. De esta manera, países que solían invertir como Suecia o Francia pierden relevancia a favor de los países centro europeos.

Lo que no cambia son las zonas donde mayor porcentaje representan las compras de extranjeros: Baleares, Comunidad Valenciana, Canarias, Murcia, Cataluña y Andalucía, según la compañía.

Tras el anuncio de la eliminación de la Golden Visa por parte del Gobierno, el análisis destaca que Baleares con más del 30%, Madrid con casi el 20% y Andalucía con el 15% son los territorios donde mayor peso tienen las compras de extranjeros iguales o superiores a los 500.000 euros. En el caso de la Comunidad Valenciana, según los datos analizados por Inmobiliarias Encuentro de los históricos de Registradores de la Propiedad, el porcentaje es del 4% y más de 55% son comunitarios.

Estas operaciones supusieron el 9,71% de las compras a nivel nacional, cerca de un 0,40% menos que en 2022 cuando se alcanzó el máximo. De igual manera, los porcentajes en 2023 son superiores a los del 2021, cuando eran del 28%, 14% y 13% respectivamente. Sin embargo, subrayan que «la medida no supondrá un golpe de efecto a la compra de vivienda por parte de la población ni facilitará el acceso a ella», aunque sí «es probable que los extranjeros piensen más a la hora de realizar este tipo de inversiones».

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