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María Teresa Bolívar
Lunes, 2 de junio 2014, 00:51
Los preparativos para abrir la piscina del campus de Elche de la Universidad Miguel Hernández (UMH) ya han comenzado. La institución prevé que la instalación esté operativa desde hoy hasta el próximo 30 de septiembre, incluyendo el mes de agosto.
Como en años anteriores, la actividad en este recinto, que permanecerá abierto desde las ocho de la mañana hasta las diez de la noche, se compaginará entre alumnos y personal de la propia universidad, los niños de la escuela de verano y el Aula Junior de la UMH y gente de fuera de la institución.
Será en julio cuando la Miguel Hernández inicie los cursos de natación, que se programarán dos días por semana y precisarán de inscripción, que se podrá formalizar en la Unidad de Gestión Deportiva de la UMH, situada en el edificio El Clot, situado entre el Palacio de los Deportes y la Avenida de la Unesco.
Además, desde ya, se pueden obtener los bonos para nadar por parte de particulares y también está abierto el plazo para que los clubes deportivos puedan hacer sus reservas para llevar a cabo los entrenamientos durante este periodo estival.
Los responsables de organizar la actividad de la piscina aseguran que los precios para su uso se mantienen igual que en ediciones anteriores. De modo que el bono de 30 baños costará 45 euros para personal de fuera de la UMH y 22,50 para la comunidad universitaria. Por su parte, el recibo de un baño es de 3 euros, la mitad para miembros de la universidad.
Además de la piscina, la Miguel Hernández dispone de campo de golf, pistas de pádel, pistas de tenis, campo de fútbol 7, campo de fútbol 11, pista de atletismo, pista de ciclismo BMX, de baloncesto y de patinaje. A estas instalaciones se suman las salas de entrenamientos y otras disciplinas del Palacio de los Deportes.
Construcción
La piscina olímpica climatizada fue de las primeras construcciones deportivas en el campus de Elche. Durante mucho tiempo arrastró problemas de humedades a causa de la cubierta que se instalaba en los meses de invierno para mantener la temperatura del agua. Por ello, desde hace algunos años, su actividad se limita a los meses del año más calurosos, descartándose otras épocas más frías.
Aunque la universidad se planteó crear una segunda piscina climatizada más pequeña, para no perder ese servicio en invierno. El proyecto tenía entre sus ventajas el hecho de que, con las nuevas instalaciones, se recortaba la capacidad a 560 metros cúbicos, lo que representaba un 25% del agua que se estaba utilizando con la grande. Incluso se había previsto que el vaso tuviera unas dimensiones de 16x25 metros y una profundidad de entre 1,2 metros y 1,6, un metro menos que la piscina actual.
Sin embargo, el proyecto quedó aparcado por falta de recursos económicos, ante los recortes de la conselleria para nuevas infraestructuras y la prioridad de destinar los fondos recibidos a construcciones docentes. Pero mientras, se seguirá usando la actual instalación, que registra una gran afluencia.
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