El PSOE da de baja a un centenar de militantes por afiliaciones irregulares

Un importante número de afiliaciones adscritas a una misma cuenta corriente, documentación incompleta, ausencia de la firma del interesado en los papeles y falta de documentos oficiales para avalar la reducción de la cuota son algunos de los casos de altas irregulares de militantes detectadas por la gestora del PSOE local.

Según explicó ayer su presidente, Antonio Torres, a preguntas de los periodistas, el partido ha dado de baja ya a un centenar de afiliados por considerar que el proceso de acceso a la formación política no cumplía con la normativa, lo que supondrá que no puedan ejercer su derecho al voto en la cita del domingo para elegir al secretario general del PSOE.

De momento, se han revisado 200 afiliaciones de militantes por parte del secretario de Organización de la citada gestora, Vicent Bufort, dentro de la investigación que dicho órgano está realizando por su parte para depurar el censo.

No obstante, se trata de una primera etapa que continuará después del día 13, anunció Torres, quien manifestó su convicción de que el número de altas ilegales irá aumentando conforme se supervise la documentación que falta correspondiente a otros 200 militantes. Éstos estarán integrados en el grupo de 750 que sí podrán participar en la elección del candidato a la secretaría general.

Torres admitió que entre los casos irregulares detectados «hay nombres conocidos», aunque no se refirió de forma explícita a nadie y señaló que «aún no es oficial». Sí advirtió de que hay comportamientos «inadmisibles» por parte de algunos militantes y aseveró que habrá sanciones para quienes «hayan violado los estatutos ». Comentó que será una comisión de disciplina la que analice cada caso y la que decida, dependiendo de la gravedad de los hechos, la sanción a aplicar. Apuntó como posible medida de castigo la suspensión de militancia para quienes estén involucrados en el fraude del censo.

La intención de la gestora es emitir un informe con las conclusiones de la revisión de las afiliaciones masivas y remitirlo al partido en Valencia, que es el que se ocupa de la investigación sobre las 156 altas supuestamente irregulares de enero.

Precisamente el asunto de las afiliaciones masivas fue el principal desencadenante de la crisis en la agrupación local, que conllevó también, a principios de junio, la dimisión del secretario general, Antonio Rodes, quien desde el principio ha sostenido que desconocía los casos de las citadas altas. En este sentido, aseguró entonces que «ni las he inducido, ni las hubiera consentido en caso de conocerlas».

Su abandono del cargo conllevó el nombramiento de una gestora, que ocupa de forma provisional la dirección del PSOE en Elche, y que dirigirá el proceso para elegir candidato a la alcaldía y la nueva ejecutiva local. La idea es que la gestora se mantenga en activo durante tres meses, tal y como indicó en su día Torres.

Sus comienzos tampoco fueron fáciles, puesto que una de las integrantes de la misma, la aspirante a las primarias María Dolores Asencio, abandonó este órgano a los pocos días de ser nombrado. Alegó que consideraba inadmisible que se incluyera en la gestora «a personas que, presuntamente, han sido las generadoras de esta situación».