Alonso fija para mañana el Pleno del estado de la ciudad y el PSOE la acusa de «filibusterismo»

Apenas 24 horas después de que el PSOE registrara su petición de convocatoria de un Pleno extraordinario para debatir el estado de la ciudad, el equipo popular de gobierno convocó ayer la sesión para mañana, viernes, a las diez de la mañana. Con ello, el mes de agosto, un mes en el que tradicionalmente la corporación no celebra reuniones ordinarias por las fiestas y las vacaciones, tendrá este año dos plenos de carácter excepcional, el de mañana y el celebrado el día 1 para debatir sobre sanidad.

La rápida convocatoria cogió por sorpresa no solo a la oposición, sino también a los concejales populares, que en su mayor parte se encuentran todavía de vacaciones. Esta circunstancia puede provocar que algún edil no pueda acudir por encontrarse de viaje.

La alcaldesa, Mercedes Alonso, que retomó la actividad municipal esta semana, no ha querido dar tiempo a la oposición para preparar esta sesión ni para que presenten propuestas de resolución que, presumiblemente, saldrían adelante tras quedar el PP en minoría con la marcha de la edil de Sanidad, Cristina Martínez, al grupo de no adscritos.

El Pleno tendrá como único punto del orden del día el debate sobre el estado de la ciudad. Los distintos grupos expondrán sus puntos de vista sobre la gestión del equipo de gobierno, pero no se adoptarán acuerdos concretos.

El portavoz socialista, Antonio Rodes, señaló ayer tras conocer la convocatoria de la sesión para mañana que «resulta curioso que no se celebre el Pleno ordinario del mes de agosto, que habíamos solicitado, y sin embargo se celebre uno extraordinario, convocado de manera precipitada». Añadió que con esta actuación del PP, «se nos hurta la posibilidad de presentar propuestas de resolución, porque tienen que presentarse 48 horas antes, que es el tiempo que hay hasta la celebración del Pleno».

Rodes indicó que su grupo tenía preparadas varias propuestas de resolución sobre los temas que se debatan, «que queríamos consensuar con algún otro grupo y ahora no podemos hacerlo». Además, indicó, estas iniciativas necesitarían contar con informes jurídicos, «que tardarían varias semanas en hacerse».

El portavoz socialista definió esta forma de actuar del equipo popular de gobierno como «filibusterismo en técnica parlamentaria. Es intentar que la oposición no pueda ni debatir, ni presentar propuestas, ni realizar la función para la que ha sido elegida». Calificó esta maniobra de «intento vano», porque «debatiremos la política municipal del Ayuntamiento de Elche en estos tres últimos años y las propuestas de resolución se llevarán al próximo Pleno ordinario».

La diputada y portavoz de Compromís per Elx, Mireia Mollà, se sumó a las críticas. «De nuevo Mercedes Alonso demuestra que esto de la democracia no va con ella», al convocar el Pleno extraordinario «con el tiempo mínimo como para que no se puedan incluir en el orden del día nuevas resoluciones».

Según Mollà, la convocatoria de la sesión en menos de 24 horas responde a «una clara intención de obstrucción de la labor de la oposición democrática. Como ha ocurrido en otras ocasiones, el PP vuelve a actuar con nocturnidad y alevosía llegando al límite de la legalidad para bloquear el normal funcionamiento de un sistema democrático».

Desde Compromís piensan que este Pleno «tiene que servir definitivamente para dejar en evidencia que Alonso se ha convertido en un problema para la ciudad».

Aforo más amplio

Unión Progreso y Democracia (UPyD) pidió ayer que el Pleno de mañana «se traslade a una sala con mayor aforo: el Auditorio del Centro de Congresos, con una capacidad de 450 personas», según su coordinadora local, Marysol Coves.

UPyD considera que, «debido al interés mostrado por muchos ciudadanos en asistir a esta sesión plenaria», el cambio de recinto es un hecho de «fuerza mayor». Con este traslado se garantizaría «la accesibilidad de los muchos vecinos a los que en los últimos plenos se les prohíbe el acceso por falta de aforo».

Según Coves, «vivimos en una legislatura donde la falta de democracia y transparencia ha provocado que los vecinos del municipio se interesen más que nunca por las decisiones políticas».