La oposición fuerza otro Pleno extraordinario para modificar la composición de las comisiones

Los concejales del grupo municipal socialista, del Partido de Elche y la concejal no adscrita Cristina Martínez forzarán un nuevo Pleno extraordinario, el tercero en tres meses, para debatir y proponer una remodelación de las comisiones plenarias. Un asunto que en la última sesión ordinaria del pasado lunes quedó sin resolver, después de que la oposición en bloque tumbase la propuesta que realizó el equipo de gobierno.

Así, explicó el portavoz del PSOE, Antonio Rodes, «vamos a realizar una propuesta de remodelación de las comisiones bien fundamentada por nuestros servicios jurídicos, con el propósito de que se respete el mandato constitucional e incluir a la concejal no adscrita en todas ellas».

Por su parte, el equipo de gobierno contestó a la propuesta mediante un comunicado en el que aseguraron que «la propuesta de la alcadesa pretendía que Cristina Martínez estuviera en todas las comisiones y el problema para el PSOE es que esa propuesta suponía que van a dejar de cobrar, ya que sólo acudiría un concejal por cada grupo». Un asunto, el de los cobros por asistencia, que en la enmienda propuesta en el último Pleno por la oposición figuraba que se ajustaría a la cantidad que hubiese presupuestada para las comisiones, sin que la inclusión de más concejales en las mismas repercutiese en las arcas municipales.

No obstante, tras finalizar el Pleno ordinario del pasado lunes, el portavoz del grupo popular, Manuel Rodríguez, aseguró que «el voto en contra del PSOE es fruto de la división interna que sufren, ya que no son capaces de enviar un concejal a las comisiones», ya que la propuesta del equipo de gobierno consistía en que cada grupo tuviese un representante y el voto fuese ponderado al número de ediles de cada formación. Una cuestión que no agradó a la oposición porque, según defendieron, «con la inclusión de más miembros se generará más debate».

Por otro lado, e grupo municipal socialista ha solicitado a l Síndic de Comptes de la Generalitat su intervención ante «las irregularidades puestas de manifiesto» en la Cuenta General de 2013, explicó la edil María Dolores Asencio.

Así, la deuda que mantiene el Ayuntamiento con la empresa de limpieza Urbaser, cercana a los 7 millones de euros, no figuró en la Cuenta General de 2012 y no lo vuelve a hacer en la de 2013, pese a las recomendaciones de la Sindicatura en un informe remitido al consistorio el pasado 19 de abril.

Asimismo, según apuntó el grupo socialista, durante el ejercicio de 2013 se efectuó un pago de más de 720.000 euros, por lo que la cantidad pendiente de pago es de más de 6,2 millones. Según el convenio suscrito con la empresa el 14 de febrero de 2012, quedó pendiente de pago pero los servicios fueron prestados según se reconoce en el convenio. El reglamento de facturación obliga a emitir las facturas y al Ayuntamiento a contabilizarlos, independientemente de que se abonen o no.

Cuestión de gráficos

La Cuenta General de 2013, aprobada en el Pleno ordinario gracias al voto de calidad de la alcaldesa, fue una cuestión de aireado debate entre Asencio y el edil de Hacienda, Manuel Latour, durante la última sesión. Así, la concejal socialista acusó Latour de «falsear las cuentas municipales», después de mostrar un gráfico para explicar la evolución de la deuda municipal y del ahorro neto de los últimos años. Un gráfico rojo y azul que diferenciaba claramente las legislaturas socialistas de la popular y que no incluía la deuda contraída con Urbaser.

Unas acusaciones que no sentaron bien al edil de Hacienda, ya que pidió que Asencio se disculpase públicamente o presentase su dimisión, al entender que el informe del Síndic de Comptes era «una recomendación y no una sentencia». Una cuestión por la que la socialista le emplazó a acudir a los tribunales «para demostrar que mi acusación es falsa», explicó Asencio.