El PSPV insta al PP a paralizar el mercado central a después de elecciones

El grupo municipal del PSOE del Elche ha instado a la junta de gobierno local (PP) a paralizar los trabajos de desarrollo del nuevo mercado central hasta después de las elecciones de mayo para que el nuevo ayuntamiento decida la continuidad del proyecto.

Esta iniciativa ha sido trasladada a través de una moción "in voce" en el pleno ordinario celebrado hoy.

El portavoz del grupo, Antonio Rodes, ha criticado la falta de apoyo social en el proyecto, que además no ha contado con el favor del resto de partidos políticos, y ha destacado el "incumplimiento" de la normativa del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) en la instalación del mercado provisional.

La alcaldesa, la popular Mercedes Alonso, no ha permitido la votación de esta moción sino que ha decidido dar traslado de ésta a la junta de gobierno local.

Así, ha indicado que la moción presentada se trataba en realidad de una sugerencia ya que no es competencia del pleno dictaminar ese tipo de cuestiones, atribuidas por ley a la junta de gobierno.

En este sentido, el concejal de Infraestructuras, Vicente Granero, ha señalado tras la sesión plenaria que la instalación del mercado provisional "cumple" con el PGOU de 1998 aprobado por el PSPV-PSOE, y se adapta además a las normativas de las zonas verdes establecidas también en este plan.

Además ha recordado que en legislaturas pasadas, el PSOE proyectó el mercado provisional en el mismo lugar donde se va a instalar ahora, una cuestión avalada por técnicos y arquitectos municipales.

Por ello ha asegurado que con estas declaraciones pretenden "poner palos en la rueda y que el nuevo mercado no sea una realidad".

El proyecto del nuevo mercado central de la empresa Aprcisa SA tiene una inversión de alrededor de 11 millones de euros y está previsto que comience a edificarse a finales de año.

El inmueble tendrá una superficie total de 24.000 metros cuadrados con una planta baja con salida a la calle y donde habrá 42 puestos interiores y 13 exteriores en la primera planta.

También se incluye un supermercado, zona comercial de 1.300 metros cuadrados y en la terraza 300 metros cuadrados cubiertos destinados a restauración y 1.000 metros en descubierto. Además de tres plantas de aparcamiento para 300 vehículos.

La propiedad de la construcción será municipal y no supone desembolso para el consistorio ilicitano, quien cede la gestión del edificio a la empresa durante 40 años.

El proyecto contempla la urbanización de las dos plazas adyacentes, la peatonalización del entorno urbano de la zona y la musealización de los restos del siglo XV y el antiguo refugio de la Guerra Civil, encontrados en las catas arqueológicas realizadas junto al edificio.

Durante los cerca de dos años que durarán las obras, los placeros se instalarán en un mercado provisional ubicado en la avenida Comunitat Valenciana, cerca del actual mercado central.