Borrar
La Primitiva de este sábado entrega dos premios de 102.557,03 euros, uno de ellos en un municipio de 1.000 habitantes
Festeras integrantes de una filà del boato de la Entrada Cristiana.
Una fructífera rivalidad

Una fructífera rivalidad

El alto nivel de los boatos de Moros y Cristianos deja uno de los mejores años de su trayectoria festera, con la primera mujer de Abanderada

GÓMEZ ORTS

Martes, 18 de agosto 2015, 00:32

Finalizadas las fiestas patronales, llega el momento de realizar un balance de lo acontecido en torno a las mismas, y comenzamos este repaso festero con La Asociación de Moros y Cristianos, cuya actuación, ya de entrada, puede considerarse altamente positiva, por mor a la superación, el esfuerzo, las ganas y el interés que han mostrado por alcanzar altas metas.

Dando por descontado el entusiasmo, el interés y las ganas de participar y hacer grandes las fiestas, ya de por sí preconcebido en todos cuantos integran esta gran familia festera, vamos a centrarnos en una faceta particularmente importante como son las Entradas. En su preparación y realización estriba gran parte del éxito de la asociación, y se sacan a relucir las comparaciones con versiones anteriores, viniendo a colofón determinadas etapas o acontecimientos.

Pues bien, las Entradas han resultado realmente espectaculares. Lo normal, lo lógico por el exotismo oriental es que la Entrada Mora resulte habitualmente más vistosa, que se revista de mayor fastuosidad, al tener mayor campo de acción para su preparación. Pero en esta ocasión no ha ocurrido lo que se consideraba lógico, y la Entrada Cristiana se vio asistida de un embrujo, un empaque muy difícil de conseguir, ya que choca con la consiguiente austeridad del bando de la cruz, particularmente en aquella época que se rememora, a de los caballeros Templarios.

Réplica

Ya puestos en liza, y ante el ingenioso boato presentado por el Capitán Cristiano a esperar la respuesta de los moros. Constituyó otra muestra de imaginación, de espectacularidad, de mucho empeño y trabajo para quedar a la altura que las circunstancias demandaban.

Y a fe que lo consiguieron, por lo que el año 2015 quedará en los anales de la historia festera como uno de los grandes, de esos que se recuerdan a través de los años, como por ejemplo ocurriera en aquel año en fueron capitanes Francisco Tormo (Moro) y Roque Candel (Cristiano), en época de mejor condiciones económicas que las actuales, y que sin duda alguna continúa siendo muy difícil de igualar, pero que en esta ocasión, pese a todo, se ha alcanzado una cota muy alta.

Así pues, tanto José María Mazón, Capitán Cristiano, de la comparsa Templarios, como Diego Maciá, de Moros Tuareg, pasarán a las historia festera como dos auténticos grandes realizadores de sus consiguientes boatos. Vamos, de los que dejan huella.

Y como novedad de estas celebraciones, el nombramiento de Mari Salinas como Abanderada de la Asociación, por la circunstancia de ser la primera mujer que ha ostentado tan significado cargo en toda la historia de Moros y Cristianos en Elche, o sea en 38 años. Una encomienda que, dicho sea de paso, ha desempeñado con una gran dignidad, con un verdadero espíritu festero, dejando bien alto su condición femenina y marcando un nuevo camino a seguir a la hora de los nombramientos.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

lasprovincias Una fructífera rivalidad