El PP teme que se desvíe el dinero de San Antón y el gobierno dice que está asegurado

El portavoz adjunto del PP, Vicente Granero, aseguró temer que desde la Generalitat se destine la partida presupuestada para la reconstrucción del barrio de San Antón (cuya primera fase se encuentra en marcha desde el pasado mes de febrero), a «rehabilitar otros barrios de otras ciudades» de la Comunitat. Según explicó el edil popular, la consellera de Vivienda, María José Salvador, en todos los municipios a los que acude promete recursos del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) y, según matizó, «puede» que sea a costa del dinero comprometido para la primera fase de reconstrucción del barrio.

En contraposición, el edil de Urbanismo, José Manuel Sánchez, aseguró que desde la conselleria reafirmaron su compromiso con el barrio y abonarán la cantidad comprometida a través de un convenio firmado entre ambas instituciones el pasado 15 de mayo, nueve días antes de los comicios municipales y autonómicos.

En el acuerdo, la Generalitat se comprometió a abonar antes del 31 de diciembre del presente año 4.252.255 euros del total de 13.319.405 euros que tiene que transferir a Pimesa para llevar a cabo la primera fase que en estos momentos está en marcha. Dinero que el ente gestor municipal todavía no ha recibido, ya que está asumiendo en solitario los pagos mediante certificación a la UTE concesionaria, conformada por las constructoras Eurolosa y Edificaciones Alcudia.

Según explicó Granero, la conselleria no paga lo adeudado porque «todavía están esperando las certificaciones de obra por parte de Pimesa», ente municipal gestor de las obras en San Antón. No obstante, según Sánchez, desde finales de junio, cuando se conformó el nuevo equipo de gobierno, se está enviado la documentación, aunque a fecha de hoy todavía no se ha realizado ningún pago de los 4.252.255 euros prometidos en el convenio.

Así con todo, Sánchez afirmó que, aunque es Pimesa la que está asumiendo los pagos, la construcción del primer bloque, que está en marcha desde el pasado mes de febrero, está asegurada porque la entidad municipal dispone de fondos.

Desde que comenzaron las obras de la primera fase Pimesa ha asumido una cuantía que sobrepasa los 700.000 euros. Cantidad que sale del presupuesto de la entidad y por tanto se trata de dinero público de todos los ilicitanos. No obstante, su condición como ente gestor no estipula que deba asumir ningún tipo de cuantía, aunque no está estipulado que la entidad municipal deba asumir ningún tipo de cuantía, pese a que los impagos de la Generalitat están provocando que Pimesa vea mermados sus fondos propios.

Según recordó Sánchez, el anterior equipo de gobierno «puso en peligro la integridad de Pimesa», ya que adjudicó la obra en noviembre de 2014 y los trabajos comenzaron tres meses más tarde sin tener ningún compromiso de pago por parte de la Generalitat.

Así, el edil hizo referencia a la premura de los populares por comenzar un proyecto sin tener asegurados los fondos necesarios, aunque el Consell recibió meses antes la transferencia de 7.208.021 euros por parte del Ministerio. Cuantía correspondiente a la parte que asume el Estado de la primera fase de reconstrucción del barrio, que implica la edificación de cuatro inmuebles.

Ciudadanos

El portavoz de Ciudadanos, David Caballero, pidió ayer en un comunicado al equipo de gobierno «saber el estado de las denuncias interpuestas sobre el Mercado Central». Según explicó el edil, el proyecto se encuentra en «situación de pausa» y tiene varios «frentes abiertos». Según dijo, «se hace necesario conocer el estado jurídico en que se encuentra el Mercado Central y el provisional que se ubicó en la ladera del río».