Escaparate del Camp d'Elx

Una nueva edición de la Fireta del Camp d'Elx fue inaugurada ayer, a las 17.30, en el Paseo de la Estación. Un total de 49 expositores mostrarán y servirán al público, hasta las 18.00 de mañana, productos relacionados con el entorno rural ilicitano.

La oportunidad de deleitar platos típicos de la gastronomía y productos autóctonos del municipio es el principal aliciente del evento. Así, el aceite de El Tendre, las almendras garrapiñadas, la miel, las golosinas artesanales, los dátiles, los quesos y los famosos melones de Carrizales, entre otras delicias emblemáticas, son los reclamos mayoritarios de los millares de visitantes que acudan a la Fireta.

De igual forma, otro factor que llama la atención ha sido la variada muestra de herramientas y vehículos agrícolas como tractores, trituradoras de palmas y motosierras. El avance tecnológico se ha convertido en un objetivo primordial para los expositores, pero sin perder, en ningún momento, la esencia de lo tradicional, como la artesanía del esparto o los bolillos.

El alcalde, Carlos González, junto a un extenso conglomerado de representes políticos, tuvo la ocasión, en el estreno de la Fireta, de dialogar con los expositores y debatir sobre la situación del Camp d'Elx. «Impresionado» con el buen nivel del certamen, aseguró que, desde el consistorio municipal, se va a trabajar para impulsar la economía ilicitana y la agricultura en los próximos años. Asimismo, confirmó que, a partir de ahora, el precio de las carpas será más barato. De hecho, en esta edición ha disminuido de forma simbólica.

Con la colaboración de los ayuntamiento de Elche y de Agost, Associació per al Desenvolupament Rural del Camp d'Elx, Unió de Llauradors i Ramaders, Comunidad de Labradores y Ganaderos de Elche, Nuevos Riegos el Progreso, Datelx y la Universidad Miguel Hernández (UMH), se realizarán estos días actividades temáticas, como una demostración de partir olivas, montura en poni -criticada por algunas organizaciones animalistas-, talleres de ganchillo, palma blanca y tarjetería o unos bailes de salón.