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Gaspar Macià
Jueves, 21 de enero 2016, 01:35
El gobierno tripartito quiere que Elche ejerza el «coliderazgo comercial» en la provincia junto con Alicante, y para ello desde el recién reconstituido consejo municipal del área se han establecido una serie de actuaciones estratégicas que implican tanto al Ayuntamiento como a los agentes económicos y sectoriales.
Así lo anunció ayer el alcalde, Carlos González, al dar cuenta de la primera reunión del Consejo de Desarrollo Comercial desde 2013. Una cita que sirvió para adaptar su composición a la actual normativa y para reflexionar en torno a un sector que constituye no solo uno de los motores económicos del municipio y el que más mano de obra ocupa, sino que es fundamental «en la vida ciudadana y para generar dinámica social», según destacó González.
En la reunión se coincidió en la necesidad de que Elche cuente con una estrategia comercial, a partir de un análisis realista del sector, y que estará basada en tres ejes. Uno será fortalecer el atractivo del municipio para que los ilicitanos hagan las compras en su ciudad; otro, atraer a consumidores de municipios vecinos, y el tercero, atraer a turistas para que compren en la ciudad.
Sobre este último punto, el alcalde indicó que entre mayo y octubre, la provincia recibe más de un millón de turistas, por lo que el objetivo es que vean en Elche no solo una ciudad para visitar sino también para comprar. «Tenemos que conseguir que Elche sea un polo de atracción comercial en la provincia, en coliderazgo con Alicante», apuntó.
Para conseguir estos objetivos, será necesario mejorar las condiciones y atractivos del pequeño comercio en todo el municipio. Para ello, el consejo aprobó dos propuestas. Una de ellas es la creación de un foro de análisis y estudio para potenciar el comercio del centro histórico y comercial, «que es el referente en la ciudad·. Para ello, se incorporarán a este grupo profesionales en arquitectura, economía y otros ámbitos, que «elaboren propuestas para revitalizar» la actividad comercial en el corazón urbano.
En la misma línea, se constituirá otro foro para estudiar la situación del comercio en barrios y pedanías, y aportar propuestas. En especial se estudiarán zonas como la avenida de Novelda, Sector V, plaza de Castilla-Universidad, Torrellano y El Altet.
El alcalde se mostró convencido de que las propuestas que salgan de estos foros «ayudarán a impulsar el comercio tradicional, que deben tener armas para competir con las grandes superficies y también en comercio electrónico»
Más participativo
En el Consejo de Desarrollo Comercial, que preside el alcalde, están representados el pequeño comercio, hipermercados, grandes superficies, mercados de abastos y mercadillos, a través de sus respectivas asociaciones locales o autonómicas. Dicho órgano municipal consultivo contará con una comisión permanente, en la que están representadas todas las entidades, para que las decisiones sean operativas en grupos de trabajo como los que se han establecido.
El edil de Promoción Económica, Héctor Díez, destacó que este consejo no se reunía desde mayo de 2013, y que en su nueva formulación se ha aumentado la participación de los colectivos de comerciantes, en detrimento de las formaciones políticas. Expresó su «perplejidad» por la ausencia del PP en la reunión constitutiva. «Ahí es donde hay que estar para hablar de como impulsar el comercio local y no haciendo ruedas de prensa ante las persianas de locales cerrados», apuntó.
En su primera reunión el consejo abordó también el calendario de festivos comercialmente aperturables. «Para nosotros era importante conseguir que el 15 de agosto, festividad de la Virgen de la Asunción y día final de las fiestas, no se trabajara», apuntó el edil.
Díez indicó que aunque ese día sigue siendo aperturable este año, el Consell deja en manos de los municipios cambiarlo por un festivo local. En ese sentido, se aprobó por consenso cambiar el 15 de agosto por el 29 de diciembre, Venida de la Virgen, que era la fecha preferida por las grandes superficies, al coincidir con la campaña navideña.
Por su parte, el concejal popular Luis Ángel Mateo, criticó que el Consell haya incluido en los días aperturables el 20 de marzo, Domingo de Ramos, fiesta de gran arraigo local.
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