Los alérgicos a alimentos atendidos en el Vinalopó se duplican en 5 años

La fruta, especialmente la que tiene la piel rosácea (como el melocotón), los frutos secos (nueces, almendras y cacahuetes) y el marisco son los alimentos que más alergias provocan en la población adulta. Así lo afirma la coordinadora del servicio de Alergología del Hospital del Vinalopó, Mónica Antón, quien resalta que esta enfermedad va en aumento.

De hecho, desde que abrió el centro sanitario, hace cinco años, los casos atendidos en la consulta por esta patología se han duplicado, tal y como señala. «Del total de pacientes alérgicos que tratábamos en 2010, el 2 o 3% presentaban reacciones a alimentos, esa proporción ahora se ha situado en el 6%», comenta.

En la actualidad, el servicio tiene registrados 2.000 pacientes alérgicos adultos, de los cuales 120 padecen estas reacciones al ingerir ciertos alimentos. Aunque no se sabe con certeza las causas que originan esta patología, la especialista indica que sí está probada la influencia de determinados aspectos como los cambios meteorológicos, que repercuten de forma negativa en el sistema inmunológico.

En cuanto a los síntomas, las alergias a los alimentos conllevan en quienes las padecen cuadros clínicos leves o moderados, como problemas gastrointestinales y cutáneos; picor en la lengua, náuseas, vómitos, diarrea y, más graves, como anafilaxis en la que se desencadena un fallo de un órgano o varios, «que sería preciso tratar con adrenalina» y que conlleva riesgo de fallecimiento del paciente, explica Antón.

La coordinadora del servicio resalta que las causas y los síntomas de este trastorno alérgico nada tienen que ver con las intolerancias alimentarias, en las que el sistema inmunológico no está implicado, que se producen como respuesta a los azúcares de ciertos alimentos, que incluso pueden ingerir en pequeñas cantidades.

Aunque la principal recomendación que los especialistas ofrecen a los afectados por las alergias alimentarias es evitar el producto que provoca los síntomas, y también otros que contengan la proteína causante de la patología, el centro sanitario está aplicando los últimos tratamientos para combatir estos problemas de salud.

La coordinadora del servicio resalta que ya se está administrando una vacuna como terapia contra la alergia a la fruta, sobre todo el melocotón. El tratamiento lleva poco tiempo en uso, pero «los resultados están siendo muy alentadores», declara. Sin embargo, su precio sigue siendo uno de los obstáculos, ya que pese a ser un tratamiento subvencionado por la Seguridad Social «el tanto por cien que debe abonar el paciente aún es elevado», puntualiza la médico.

Taller infantil

Otro de los fármacos empleados contra las alergias alimentarias es el anticuerpo monocloral Omalizumab, que también se utiliza para tratar el asma alérgico y mejora a los pacientes que además padecen ese tipo de reacciones alimentarias. «Es una inyección que se pone a nivel hospitalario una vez al mes», agrega.

En la lista también figuran los simbióticos, que combinan la acción de los suplementos probióticos y prebióticos y mejoran la flora intestinal.

Tanto los avances en el diagnóstico como las últimas terapias contra esta patología centrarán la jornada que se celebrará mañana por la tarde, a partir de las 17.30 horas, en el Hospital del Vinalopó. Se trata de un encuentro organizado por la Asociación Española de Personas con Alergia a Alimentos y Látex. En ella intervendrá el alergólogo Joan Domenech, del Hospital de Elda, miembro de la Asociación Valenciana de Alergología e Inmunología Clínica, que preside Mónica Antón.

Al finalizar la charla tendrá lugar un taller, dirigido a niños alérgicos, con el fin de que puedan identificar en qué alimentos, tanto naturales como manufacturados, se encuentran las proteínas causantes de las reacciones de su sistema inmunológico. En la población infantil, tal y como señaló la especialista del centro hospitalario ilicitano, las alergias alimentarias más frecuentes se dan a la leche, huevos y pescado.