Los pisos nuevos de San Antón costarán de 18.000 a 30.000 euros

La rehabilitación del barrio San Antón empieza a tomar cuerpo. Las obras de las 74 viviendas del primer bloque que se ha reformado en esta zona están a punto de concluir y el tripartito ha logrado, en coordinación con la Generalitat, que sean calificadas como VPO, para evitar especulaciones por parte de los propietarios y que estos tengan acceso a la máxima subvención de fondos públicos, para estos casos el 66% de ayudas oficiales. Así lo explicó ayer el concejal de Urbanismo, José Manuel Sánchez, quien lamentó «la irresponsabilidad» del anterior gobierno, que programó que estos pisos «fueran de renta libre».

Sánchez aseguró que ninguna de estas viviendas está adjudicada aún, como réplica a algunos rumores que circulan, según dijo, y comentó que las reuniones con los vecinos -de los bloques 11, 12, 13 y 14- para iniciar el proceso de comercialización de las mismas comenzará a finales de junio o principios de julio, una vez concluyan los trabajos de construcción.

En este sentido, indicó que los precios que se marcaron en su momento «no han variado» y puntualizó que se moverán entre los 18.000 y los 30.000 euros, dependiendo de la superficie de cada vivienda, ya que la mayoría tiene dos dormitorios -56 de las 74 viviendas- y otras -en concreto 18- disponen de tres.

No obstante, matizó que el objetivo del equipo de gobierno es ajustar estos precios a la baja y anunció que también se está negociando la inclusión de algunas excepciones en cuanto al reparto de pisos, para evitar agravios comparativos y que se tengan en cuenta circunstancias puntuales como, por ejemplo, que un propietario tenga dos pisos de 40 metros cuadrados unidos, que forman una única vivienda, pero registralmente sean dos.

Sánchez también se refirió a las obras del segundo bloque a construir dentro de esta primera fase de renovación del barrio y anunció que la Junta de Gobierno Local aprobó ayer el convenio que tendrá que firmar con la Generalitat para llevar a cabo dichas obras. Este trámite permitirá que el Pleno del Consell, que se reúne la próxima semana, pueda dar luz verde a los trabajos, de forma que, y como establece una de sus cláusulas, adelante parte de la inversión que requiere el proyecto, en concreto, el 15%, una cantidad superior al millón de euros, de los siete que aportará a esta actuación.

Para evitar que el proyecto se demore y solucionar cuanto antes la situación de San Antón, el concejal de Urbanismo precisó que el consejo de administración de Pimesa ya dispondrá del pliego de condiciones para adjudicar dicho proyecto, mientras que el equipo de gobierno aprobará, también la próxima semana, la licencia de obras, de forma que los trabajos puedan iniciarse a la vuelta del verano, hacia el mes de octubre, según apuntó Sánchez.

Este segundo bloque contará con un total de 120 viviendas, dos locales comerciales y 88 plazas de aparcamiento. Esta obra y la del primer bloque supondrá la rehabilitación de 200 de las 308 viviendas incluidas en la primera fase de renovación de San Antón.

Además de estas obras, el edil recordó que el Ayuntamiento está realizando labores de mantenimiento en otros bloques, con un coste de 1.100.000 euros, y comentó que esta actuación se ha llevado a cabo en diez de los catorce edificios. Los trabajos se realizarán próximamente en los restantes, el 2, 3, 4 y 5, tal y como anunció.