La casa de los líos socialista

Esperpéntica jornada entre los grupos políticos llamados a dirigir la Comunitat Valenciana, con cruce de declaraciones, comunicados y miles de llamadas todo el día. Todo, para nada. Al cierre de esta edición, al menos, no había ningún pacto cerrado entre ninguna fuerza política para presidir Les Corts Valenciana, cuya sesión constituyente se celebra hoy.

El colmo del despropósito llegó a media tarde, cuando el vicesecretario de Relaciones Institucionales del PSPV, José Manuel Orengo, anunciaba en una rueda de prensa un presunto acuerdo con Ciudadanos mediante el cual el castellonense Francesc Colomer sería el presidente de Les Corts y el coordinador regional de Ciudadanos, el alicantino Emilio Argüeso, el vicepresidente. Orengo explicaba en la sede socialista de Blanquerías los pormenores de esta alianza cuando, a preguntas de este diario, se enteró de que Ciudadanos lo acababa de desmentir de manera oficial con un comunicado.

Tras un momento de zozobra en la sede socialista, se aseguraba que había sido todo un malentendido y que habría otro comunicado desde Ciudadanos. Así resultó, pero fue peor el remedio que la enfermedad. La formación de Carolina Punset supeditaba el pacto a que los socialistas renunciaran públicamente a apoyar a Joan Ribó como candidato a la Alcaldía de Valencia. Por su parte, Albert Rivera también lo desmintió en un programa en TV3.

Este presunto acuerdo con Ciudadanos fue la respuesta socialista a las llamadas lanzadas desde Compromís para retomar la negociación a nivel autonómico iniciada junto a Podemos y que el PSPV rompió el martes por la negativa de Oltra a que Ximo Puig fuera el presidente.

Según ha podido saber este diario, Ximo Puig se puso ayer en contacto con la candidata de Compromís, Mónica Oltra, para tratar de mantener un encuentro privado entre ambos y tratar de desbloquer las negociaciones. La lideresa de Compromís no quiso.

La respuesta crispó aún más si cabe más a los socialistas, que reactivaron el contacto con Ciudadanos. Al parecer, el principio de pacto anunciado por los socialistas fue eso, un anuncio sin nada detrás.

Sin embargo, Blanquerías continuaba confirmando el acuerdo al cierre de estación. De hecho, distintos miembros de la dirección socialista aseguraban que el acuerdo estaba cerrado con el visto bueno tanto de la dirección territorial de Ciudadanos, que encabeza Carolina Punset, como de la dirección nacional de Albert Rivera. Si no cambiaron las cosas a lo largo de la que se preveía larga madrugada, esta mañana se verá quién tenía razón.

Dicho acuerdo, según los socialistas, suponía la presidencia de las Cortes para el PSPV, que recaería en el castellonense Francesc Colomer y la vicepresidencia para Emilio Argüeso. Además, los socialistas anunciaron una dirección del grupo integrada por los valencianos Manolo Mata, José Muñoz y Carmen Martínez, junto a la alicantina Ana Barceló.

Con todas estas, Les Corts se constituyen esta mañana sin que, al cierre de esta edición, haya nada seguro. El PSPV propondrá que el diputado por Castellón Francesc Colomer sea el presidente de la Cámara; mientras que los populares apuestan por Alejandro Font de Mora. Compromís mantiene a Enric Morera como su apuesta para ser la segunda autoridad de la Comunitat. Los socialistas se encontraron, de repente, compuestos y sin novia. Tuvieron que volver a recurrir a Compromís, quienes tratan de reconducir la situación.

En este contexto, Compromís trasladó al PSPV y a Podemos una propuesta de votación para la próxima Mesa que pasa por que la presidencia de la Cámara la ostente un socialista, la vicepresidencia primera un diputado de Compromís y la secretaría primera otro de Podemos. El portavoz de la Ejecutiva de Compromís y diputado autonómico, Enric Morera, hizo este anuncio con el que desde la coalición esperan que sea un paso «muy positivo» de cara a la negociación con PSPV -que insisten en no dar por rota- y Podemos para alcanzar un acuerdo de gobierno.

La propuesta contempla que queden vacantes la vicepresidencia segunda y la secretaría segunda, con el objetivo de que sean ocupadas por diputados del PP y de Ciudadanos. Los socialistas criticaron que Compromís haya hecho este ofrecimiento tras el anuncio del pacto con Ciudadanos.