Pilar M. Maciá
Martes, 19 de mayo 2015, 01:42
Mónica Lorente dio ayer un paso que se esperaba desde hace meses y manifestó su apoyo en público a la que ha sido su compañera y mano derecha durante ocho años, Pepa Ferrando, y a la lista de personas que la acompañan en la candidatura municipal de Foro Demócrata. La exalcaldesa oriolana y ex secretaria general del PP en la provincia prácticamente finiquitó así sus veintidós años de militancia popular y se puso a las puertas de la expulsión no ya por levantar las cartas y adherirse al proyecto de Ferrando sino por arremeter contra la cúpula popular regional, provincial y local.
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No dejó títere con cabeza la todavía concejal y diputada provincial que comenzó su comparecencia calificando como «el mayor ejercicio de cinismo que se ha visto nunca» la actuación de su partido contra la que hasta diciembre fue presidenta oriolana, y consideró que con o sin moción de rechazo a la inclusión de imputados en las listas electorales «la hoja de ruta estaba escrita» y en ella ponía, según Lorente, que Pepa Ferrando no podía seguir a la cabeza del PP local.
El primer ataque fue para José Císcar, el presidente provincial del que dijo que «quería apropiarse no solo del número uno de la candidatura sino de la candidatura entera, porque no le importan los vecinos, ni siquiera el agua porque ha tenido cuatro años para reivindicar el Trasvase del Ebro y no se va a enfrentar a Luisa Fernanda Rudi ni a Cospedal». Lorente añadió que lo que quiere el alicantino es «tener la cuota de poder en el PP» y añadió que para eso ha puesto a sus más afines en los primeros puestos de la lista autonómica en la provincia, «porque ¿quién representa a la Vega Baja, Eva Ortiz? Saben ustedes que no».
Tampoco se escapó de las críticas la secretaria general del PPCV, Isabel Bonig, a la que Lorente echó en cara no haber trabajado por Orihuela en la conselleria de Territorio y Medio Ambiente de la que es titular, sino de acudir solo a la ciudad «para expulsar a mis compañeros de partido». Por todo esto pidió el voto para la candidatura de Pepa Ferrando y rechazó el «dedazo» por el que Emilio Bascuñana es candidato del PP. De él dijo que tiene una lista que salvo por un par de personas está formada «por hijas e hijos de contratistas de otras épocas del Ayuntamiento». Lorente pidió que se dejen «el cuento de las imputaciones» porque hay «candidatos que lo están» en otros municipios, y defendió que la de Pepa Ferrando es puramente administrativa al tiempo que no escondió que «la única que está imputada en un caso de corrupción soy yo y me aparté» en referencia a Brugal, del que dijo que «pronto se aclarará».
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