Joan Ribó: «Volveremos a tomar el testigo que hoy cedemos»

«Volveremos a tomar el testigo que hoy cedemos». Con estas palabras el candidato a revalidar la alcaldía de Valencia por Compromís, Joan Ribó, se ha despedido de sus esperanzas tras la mayoría de las fuerzas de derechas en el consistorio.

Ribó ha aparecido en el estrado sobre las 22.30 horas, cuando ya el cambio de signo se confirmaba con el escrutinio casi completo. Arropado por un aplauso de los suyos se ha dirigido a militantes y periodistas para agradecer a todos su presencia y admitir que hay «un cambio de mayoría absoluta».

Al mismo tiempo, ha felicitado a la que se perfila ya como nueva alcaldesa, María José Catalá. «Yo lo hago públicamente aquí, cuando yo llegué en 2015 ella no me felicitó, lo hizo un secretario. Tenemos que ser diferentes», ha recordado.

Desde su análisis, «ha habido una gran ola de color azul y no hemos sido capaces de sobreponernos a estas tendencias que nos han impuesto desde Madrid». A su entender, «muchos no han pensado en cómo está Valencia en este momento».

Ribó ha hablado de futuro. «Seguiremos haciendo una defensa de Valencia para seguir trabajando por una ciudad más amable, esa será la posición de Compromís»

En la plaza del Pilar, escenario de la espera de Compromís, se ha vivido ante todo, una noche de tensión. Mucha tensión. A las 21 horas todo eran caras largas o sonrisas no muy efusivas frente a los primeros resultados de escrutinio que ya hablaban de un cambio de signo político en las fuerzas del ayuntamiento.

Eso sí, al comienzo de la tarde, había esperanza. «Soy un optimistas incorregible e intento que no me perjudique la participación, filtraciones, nada… Me dejo guiar por mis sensaciones y mis sensaciones son ahora muy buenas», se expresaba Joan Baldoví, poco antes del cierre de los colegios electorales. «En mi pueblo, decimos una cosa que es 'la sangre al 10', es decir… mucha tranquilidad. Sé que es una noche importantísima, nos jugamos mucho, pero soy una persona tranquila», apuntaba en ese instante.

Preguntado sobre si los primeros datos de participación podrían beneficiar al bloque valenciano de la izquierda, el candidato por Compromís a la presidencia de la Generalitat aseguraba: «He leído tantas cosas esta tarde… Unos dicen que la participación ha aumentado, otros dicen que en unos barrios más que otros… Probablemente en los obreros no tanto… Lo sabremos a partir de las ocho».

En ese momento de la jornada,Baldoví era muy consciente de lo reñido de la noche y lo fiaba todo a la juventud: «Va a estar más reñido que el año pasado, pero nos va a salvar la gente joven».

Poco después de las ocho de la tarde, la número dos en las listas municipales de Compromís, Papi Robles, también valoraba las primeras encuestas ofrecidas por la televisión autonómica y que en ese momento no era favorables para el bloque de la izquierda. «Las encuestas, encuestas son. Nosotros tenemos confianza y valoro positivamente la participación», ha señalado en una corta comparecencia en uno de los estrados.

La noche electoral se ha vivido en una gran carpa instalada junto a la sede del partido en la plaza del Pilar, en el casco antiguo de Valencia. Desde las siete de la tarde han comenzado a llegar ya periodistas y militantes. En el interior se han levantado dos estrados, uno más amplio con pantalla gigante y otro más pequeño en la parte derecha.

Sobre las 19.20 horas ha llegado el candidato a la alcaldía del Ayuntamiento de Valencia y cabeza de lista municipal, Joan Ribó. El veterano de la formación ha sido prudente en valoraciones. «Ha habido una elevada participación y lo que es seguro es que esto beneficia a la democracia», han sido sus escuetas palabras.

Los candidatos han cenado cenan sobre las 20 horas una cena «de bocata» en el interior de la sede, pendientes de una pantalla para seguir los resultados, para luego comparecer en la carpa.

La nota curiosa en la espera electoral de Compromís ha llegado con un pequeño momento de tensión. Una vecina se ha quejado de que la carpa está a menos de ocho metros de una fachada protegida, pero responsables de comunicación lidl partido le han asegurado que cuentan con los permisos del ayuntamiento. No parecía muy conforme, pero finalmente se ha marchado.

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