González Pons, Catalá, Daroca y Mompó, anoche en Valencia en el arranque de la campaña electoral. J. Signes

PP y Vox afrontan el 23-J con viento de cola frente a una izquierda en shock

La bronca en el seno del PSPV y con Compromís, monopoliza el arranque de la campaña de las elecciones generales en la Comunitat

JC. Ferriol Moya

Valencia

Jueves, 6 de julio 2023, 23:42

La campaña para las elecciones generales del 23 de julio se ha colado en el día a día de la actualidad política de la Comunitat ... en plena puesta en marcha de la nueva legislatura autonómica. La petición del voto que los partidos pueden hacer desde la pasada medianoche coincide con el acuerdo sobre el calendario parlamentario más inmediato, con fechas definidas para la investidura como presidente de Carlos Mazón, y con el terremoto político que este mismo jueves generó Ens Uneix, el partido de Jorge Rodríguez, al anunciar que no apoyará al PSPV para la presidencia de la Diputación de Valencia.

Publicidad

Esta última decisión constituye el mejor epitafio de la etapa abierta el pasado 28 de mayo. La izquierda valenciana que llegaba a la cita electoral municipal y autonómica de hace mes y medio se ha visto zarandeada por las urnas, despedida del Gobierno de las principales instituciones. Y lo que es peor, vislumbra ya el horizonte de las habituales batallas internas por el poder.

No bastaba con que PSPV y Compromís andaran a la greña por esa jugada magistral del PP de apoyar a la candidata de la formación nacionalista para que fuera ella y no la aún consellera en funciones Josefina Bueno la secretaria segunda de la Mesa. Ahora se suma también el pulso por el control del socialismo valenciano, que es el que se deja ver en la decisión de Ximo Puig de situar a Rebeca Torró como síndica del PSPV en Les Corts. Por un lado, resguarda a su favorito, Arcadi España; por el otro, provoca la ruptura de Ens Uneix con la dirección provincial del PSPV. Puig no presidirá la Generalitat, y Bielsa tampoco la Diputación. Y todo ello, para igualar las fuerzas de cara al congreso de los socialistas valencianos, llamado a ser -como siempre que el PSPV está en la oposición- una bomba de relojería. La izquierda prepara el 23-J de la peor manera posible, no sólo recién derrumbada, sino más dividida que nunca.

La jugada del PP en la Mesa de Les Corts ha acabado de romper las relaciones entre PSPV y Compromís

¿Y PP y Vox? Pues todo lo contrario. El PP valenciano que lidera Carlos Mazón arrasó el 28-M al pasar de 19 a 40 diputados en Les Corts. Un éxito en primera persona del que será en los próximos días nuevo presidente de la Generalitat. Los populares, que superaron incluso las mejores predicciones de los sondeos, afrontan ahora la cuesta abajo del proceso, la investidura, la toma de posesión, los nombramientos... la campaña electoral del 23-J coge a los populares valencianos sin urgencias. El objetivo se ha logrado de sobras. Aportar ahora a Alberto Núñez Feijóo el mayor número posible de diputados, igual que reforzar todo lo posible las opciones de Esteban González Pons de convertirse en ministro, es un objetivo prioritario, qué duda cabe. Pero la dirección del PPCV llega a ese objetivo con sus deberes hechos. No sólo ganar las elecciones, sino también tener un pacto de Gobierno que garantiza la investidura.

Publicidad

El debate de los pactos con Vox, es verdad, ha venido salpicando toda la precampaña. Los populares valencianos fueron los primeros en cerrar un pacto con la formación de Santiago Abascal. Y esa circunstancia, unido a las posiciones de Vox en relación con las políticas contra la violencia de género, han venido monopolizando el arranque de la campaña electoral.

El PP aspira a lograr un resultado que consolide el éxito del 28-M y refuerce más si cabe la influencia de González Pons

Pero en la Comunitat, el choque de PSPV y Compromís por la elección de los miembros de la Mesa de Les Corts, primero. Y la polémica generada en el seno del socialismo valenciano con motivo de la designación de Gabriela Bravo como vicepresidenta segunda de Les Corts, se suma ahora a la decisión de Ens Uneix de no apoyar a los socialistas para presidir la Diputación de Valencia. Natalia Enguix, diputada provincial del partido de Jorge Rodríguez, o el propio PP de Vicent Mompó, están en condiciones de alcanzar la presidencia de la corporación provincial. Ni el PSPV de Carlos Fernández Bielsa ni Compromís. Las peores condiciones posibles para afrontar una campaña electoral.

Este contenido es exclusivo para suscriptores

Suscríbete a Las Provincias al mejor precio: 3 meses por 1€

Publicidad