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Redacción.
VALENCIA
Martes, 4 de marzo 2025, 23:44
A lo largo de 2024 Valencia se ha convertido en la Capital Española de la Economía Social. Bajo el lema 'La economía con valores', la ciudad ha sido escenario de infinidad de actividades que han permitido visibilizar una forma diferente de contribuir al crecimiento global, a la generación de empleo y al fortalecimiento de los tejidos sociales y empresariales. Emilio Sampedro, presidente de Concoval, hace balance tras la clausura de la capitalidad.
-¿Qué ha significado para Valencia ser la Capital Española de la Economía Social 2024 y qué impacto ha tenido en la ciudad, la provincia, incluso, en la Comunitat? Si lo tuviera que definir en una frase, ¿cuál sería?
-La designación de Valencia como capital española de la economía social ha supuesto una gran oportunidad para impulsar en la Comunitat este modelo económico, que es más justo, igualitario, participativo e integrador, y que sitúa a las personas en el centro. Además, nos ha permitido a las diferentes organizaciones de la economía social con presencia en el territorio trabajar juntas en pro de un objetivo común y estrechar lazos entre todas las familias de la economía social valenciana: cooperativas, empresas de inserción, organizaciones de la discapacidad y del tercer sector de acción social, sociedades laborales, mutualidades, centros especiales de empleo de iniciativa social, cofradías de pescadores, y entidades vinculadas a la economía social en el ámbito universitario y académico. Es la primera vez que trabajamos todos juntos en un proyecto compartido. Si tuviera que elegir una frase para definir este año, sin duda haría referencia al lema que elegimos para esta capitalidad: «Hemos demostrado que somos la economía con valores».
-¿Qué balance realiza de este año de Capitalidad? ¿Se han cumplido los objetivos marcados?
-Lo cierto es que 2024 iba a ser un año memorable para la economía social valenciana. Pero la capitalidad fue interrumpida por la tragedia cuando quedaban aún algunos de sus 'platos fuertes': alrededor de un tercio de las más de setenta acciones programadas estaba concentrado precisamente en los últimos meses del año, en especial el Congreso internacional que estaba llamado a ser el hito principal de toda la Agenda. Así que, sin duda, el balance nos deja un sabor agridulce. Sin embargo, nos quedamos con la parte buena. Esta capitalidad nos ha servido para dar mayor visibilidad al sector, ha fortalecido la colaboración público-privada y ha fomentado la creación de redes entre empresas, administraciones y entidades.
-La economía social representa un 10% del PIB nacional ¿Qué papel juega Valencia en la consolidación de este modelo económico en España?
-La economía social tiene en la Comunitat Valenciana una gran fortaleza y una más que notable proyección de futuro. Impulsada sobre todo por un cooperativismo muy potente, la economía social valenciana está en el top tres español tanto en número entidades como en empleo generado. Siempre decimos que Valencia es territorio cooperativo. Y lo decimos porque hay datos que nos avalan. Por ejemplo, Valencia es la provincia española con un mayor número de personas trabajando en cooperativas. Entre las cinco mayores empresas valencianas tenemos dos cooperativas. Somos el territorio de España con mayor concentración de cooperativas de crédito: en nuestra Comunitat están 30 de las 61 que hay en todo el Estado. Las cooperativas agroalimentarias valencianas generan más del 15% del total de puestos de trabajo de esta clase de cooperativas en España y son, además, el principal agente de vertebración territorial y desarrollo rural en la Comunitat y protagonistas indiscutibles del sector exportador, donde adquieren un valor estratégico para la internacionalización de la economía valenciana, puesto que exportan más del 88% del valor de la producción que comercializan. El cooperativismo de enseñanza de la Comunitat destaca como foco de innovación pedagógica y constituye el principal agente de la enseñanza laica concertada y una de las dos cooperativas que imparten estudios universitarios en España es valenciana. Las universidades valencianas cuentan con el mayor polo de investigación en economía social de toda Europa y, probablemente, del mundo. Podríamos seguir dando más datos que reflejen la primordial contribución de la economía social valenciana, pero al final lo importante es quedarse con el mensaje de que la Comunitat es pionera en la integración de la economía social en las políticas de desarrollo territorial, de emprendimiento y de empleo, así como en la exploración de su potencial para desarrollar la innovación en sectores como la energía, la educación, la vivienda o los servicios a la ciudadanía.
-Valencia cuenta con más de 9.400 entidades de economía social que generan 170.000 empleos. ¿Cuáles son los principales desafíos que enfrenta el sector en la Comunitat?
-Uno de los principales retos a los que nos enfrentamos es atraer a la juventud hacia nuestro modelo empresarial. Porque, pese al problema de relevo generacional que tenemos en algunos sectores, los estudios que hemos hecho nos dicen que las personas jóvenes están alineadas con nuestros valores cooperativos. Así que tenemos que ser capaces de traducir esa predisposición de la juventud hacia la economía social en un mayor número de jóvenes en la base de nuestras empresas.
-¿De qué manera se han visto afectadas las cooperativas con la dana ocurrida el pasado mes de octubre y que llevó a suspender los últimos actos de la capitalidad?
-Un 30% de las cooperativas de la Comunitat tienen su sede en la provincia de Valencia: son 478 empresas que están radicadas en los municipios afectados, en los que hay alrededor de 11.000 personas trabajando en cooperativas. La catástrofe provocada por el temporal del 29 de octubre en Valencia fue de una magnitud descomunal. Era absolutamente impensable, en aquella situación, mantener la agenda de la capitalidad. Más de la mitad de la población valenciana es cooperativista y, además, las comarcas más afectadas son intensivas en cooperativismo. No podíamos mirar hacia otro lado y, desde la misma noche de la tragedia, las cooperativas valencianas nos movilizamos para hacer frente a la emergencia.
-Las cooperativas juegan un papel clave en la economía social ¿Cómo se está impulsando su crecimiento y qué incentivos existen para fomentar su creación?
-Efectivamente, la cooperativa es la fórmula más genuina y extendida de la economía social. En la Comunitat Valenciana, concretamente, el impulso del cooperativismo está ordenado en el plan Fent Cooperatives, que va ya a por su tercera edición y que establece los objetivos globales de cada periodo, concretando en cincuenta medidas las acciones a desarrollar para mejorar la competitividad de las cooperativas en nuestro territorio y reforzar su contribución al progreso económico y social de la Comunitat.
-¿Cuáles han sido los principales logros alcanzados durante este año de capitalidad? ¿Hay algún hito o actividad que destacaría especialmente?
-Hemos conseguido que la economía social gane presencia en la agenda institucional y empresarial, consolidando su papel en el desarrollo económico y social. También destacaría el fortalecimiento de redes entre entidades y la participación en eventos que han dado visibilidad a nuestro modelo. Como hito, yo me quedaría quizá con que hemos sido capaces de demostrar que la economía social está por encima de colores políticos. En este proyecto estuvieron involucradas Administraciones con signo ideológico opuesto, pero la fotografía que nos regalaron la alcaldesa de Valencia y la vicepresidenta del Gobierno de España, caminando juntas el día de la inauguración oficial de la capitalidad, creo que fue todo un ejemplo y una auténtica lección, especialmente en medio de un contexto político tan tensionado como el que vivimos últimamente.
-¿Qué legado espera que deje la capitalidad de Valencia en la economía social y cómo se puede garantizar la continuidad de las iniciativas que se están promoviendo este año?
-El principal legado es haber situado la economía social en el centro del debate sobre el modelo económico del futuro. El reto ahora es consolidar lo logrado. Es crucial conseguir que las administraciones mantengan su apoyo, seguir generando alianzas estratégicas y crear un escenario propicio para que las empresas del sector continúen innovando y expandiendo su impacto en la sociedad. Pero, con todo, yo creo que el principal legado ha sido la consolidación de las relaciones entre las propias organizaciones de la economía social valenciana. Esta capitalidad nos ha dado la oportunidad de 'redescubrirnos' mutuamente y de estrechar unos lazos que, seguro, nos llevarán en un futuro muy próximo a desarrollar nuevos proyectos juntos.
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