En ocho años logra un gran crecimiento con 1.000 socios

Hace ocho años, en mayo de 2012, abrió sus puertas la Cooperativa de Peluqueros y Esteticistas de Castellón. Lo hizo al abrigo de la Cooperativa de Peluqueros y Esteticistas de Valencia, que cuenta con 44 años de experiencia, y que, hasta la fundación de la cooperativa castellonense, se ocupaba de esteticistas y peluqueros de la provincia de Castellón.

El objetivo principal de este modelo de cooperativa es la adquisición y distribución entre los socios cooperativistas de todos los elementos de trabajo y productos que utilizan en sus establecimientos. Los productos tienen precios más asequibles respecto al mercado tradicional, es decir, sin competencia gracias al modelo cooperativo. Esto es posible ya que lo que se busca es el beneficio de todos sus dueños, sus socios. Así, los peluqueros pueden obtener todo el material que precisan para llevar a cabo su actividad profesional.

Además, otra de las ventajas que estos profesionales encuentran es que no cargar sus almacenes, ya que van comprando en función de lo que van consumiendo y así no tienen exceso de productos en sus negocios porque «al final es dinero que se tiene paralizado», afirma el presidente de la Cooperativa de Peluqueros y Esteticistas de la Comunitat Valenciana, Julio César Marcelo Barberá. Además de productos de peluquería también hay artículos para los esteticistas. «La peluquería y la estética son dos actividades profesionales muy ligadas y existen multitud de peluquerías que son centros de belleza integral y que ofrecen todos los servicios, por lo que este tipo de productos también se pueden encontrar en la cooperativa», apunta el presidente.

La dirección de esta cooperativa está formada por un equipo rector de nueve socios en activo, que de forma desinteresada y voluntaria colaboran en la gestión y dirección de la entidad. Cuando en 2012 comenzó su andadura la sede de Castellón, 30 eran los socios que la conformaban. «Hoy en día la cifra de cooperativistas ronda los 1.000. Una cifra considerable que muestra su crecimiento. Sobre todo teniendo en cuenta que el modelo asociativo no tiene mucha tradición en este sector», apunta Julio César Marcelo Barberá.

Darse de alta como socio de está cooperativa es muy sencillo, hay que realizar una aportación única de 24,04 euros y con ello ya se puede acceder a toda la gama de productos llegados directamente de fábrica, y a unos precios mucho más económicos que los que encontrarían realizando su actividad de forma individual.

«La pandemia que estamos atravesando ha generado una crisis de la que todavía desconocemos las consecuencias reales que puede tener. El sector de peluqueros se ha visto afectado durante el confinamiento, pero también ha sido de los primeros gremios en reanudar su actividad durante la desescalada», explica el presidente y señala que, pese a ello, ha habido un descenso de ventas de la Cooperativa y «es una incertidumbre como va afectar a su futuro».