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Jorge Peiró
Lunes, 25 de octubre 2021
La Cátedra Internacional de Ética Empresarial IECO-UV pretende mejorar la sociedad desde la reflexión ética. Consolidarse como un referente para impulsar el diálogo entre las ciencias sociales y la filosofía es fundamental para mejorar la salud ética del mundo actual. Los acuerdos de la cátedra con distintas entidades para impulsar la formación investigadora de los miembros del IECO ha resultado capital para seguir progresando. Manuel Guillén, director de la Cátedra Internacional de Ética Empresarial IECO-UV, agradece el compromiso de sus colaboradores y hace hincapié en el papel de tres patrocinadores pilares como son RNB, Royo Group y Guzmán Global: «Nos proporcionan su apoyo y su ejemplo».
La Cátedra Internacional de Ética Empresarial IECO-UV está adscrita a la Universitat de València, y se crea por iniciativa del Instituto para la Ética en la Comunicación y en las Organizaciones, el IECO de la Fundación COSO. Nació con la finalidad de desarrollar los programas de investigación, formación y difusión de buenas prácticas del IECO, a nivel nacional e internacional, promoviendo la ética en el ámbito de la comunicación y las organizaciones. «Para lograrlo, se establecieron vías de colaboración con las empresas patrono, RNB, Royo Group y Guzman Global, que estaban ya comprometidas con la mejora de la calidad ética de la propia organización y de la sociedad en su conjunto», explica Guillén.
La cátedra persigue impulsar una visión humanista del 'management', un prisma que vele por la dignidad humana, el trabajo humano y el crecimiento plenamente humano de las personas en las organizaciones. «Este tipo de cátedras deben prevalecer porque suponen un puente de conexión entre dos realidades que deben estar en permanente diálogo -el mundo académico y el mundo profesiona-, suponen una fuente de generación de conocimiento colaborativo entre empresas y universidades que fluye en ambas direcciones y porque constituyen una oportunidad para el crecimiento y la mejora común tanto de las empresas y como de la universidad, y de la sociedad en su conjunto», relata el director de la cátedra.
El hecho de partir de un propósito común ha cristalizado en una estrecha relación entre empresas y cátedra. La visión humanista que compartían ha llevado a que este vínculo se haya reforzado más si cabe gracias a que las empresas «nos ofrecen sus experiencias y sus buenas prácticas y nosotros les procuramos dar herramientas teóricas y prácticas que permitan seguir en esa línea humanista que ya procuran vivir en su día a día», detalla Manuel Guillén. El máximo responsable augura un futuro ilusionante para la cátedra, que se ha embarcado en unos estudios en colaboración con el 'Human Flourishing Program' de la universidad de Harvard acerca de las motivaciones humanas y la felicidad en el trabajo.
«Hemos creado una plataforma que se llama www.trabajoenbuscadesentido.com en la que cualquier persona puede acceder y analizar si realmente está motivada, y reflexionar acerca de cómo encontrar más sentido a su trabajo. Además, estamos organizando un seminario de tres días en Harvard para directivos de empresas que quieran potenciar este enfoque de Management Humanista», explica.
Fidel García-Guzmán
CEO de Guzmán Global
–¿Qué ha llevado a Guzmán Global a colaborar con la cátedra?
–Desde siempre, en Guzmán hemos dado mucha importancia al modo de hacer las cosas; entre nuestros valores siempre ha estado presente la necesidad de hacer las cosas bien y con un sentido ético y comprometido. Hace ya más de cinco años que elaboramos y difundimos nuestro Código Ético, integrando dichos valores históricos y reformulándolos de cara al nuevo contexto social y económico de nuestros días. Además, desde hace tres años hemos trabajado muy intensamente en el desarrollo de nuestra Política de Responsabilidad Social, que se proyecta tanto internamente hacia nuestras personas, como externamente hacia la sociedad y el medio ambiente. Por todo ello, cuando conocimos a las personas que forman parte de la Cátedra de Ética Empresarial IECO-UV y recibimos la invitación para ser empresa patrono, nos pareció que tenía todo el sentido hacerlo, dado que ello venía a reforzar nuestro compromiso, y abría nuevas posibilidades de actuación e intercambio de experiencias con otras empresas y organizaciones con valores similares.
–¿En qué medida esta colaboración contribuye a hacer de su empresa una organización más humana?
–Sin duda, la perspectiva que aporta nuestra colaboración con la cátedra tiene siempre un enfoque en las personas como elemento esencial de las organizaciones, así como en sus expectativas, inquietudes y posibilidades de desarrollo. Por ello, la faceta humana impregna siempre las reflexiones y actuaciones de la cátedra y éstas se perciben por nuestras personas en la empresa con ese marchamo humanista.
–¿Por qué cree que funciona tan bien la relación entre empresa y universidad que se refleja en las cátedras de empresa?
–Quizá porque representan la posibilidad de canalizar intereses convergentes por ambas partes, de modo que tanto la cátedra como la empresa comparten objetivos comunes en facetas, proyectos o ámbitos específicos de interés mutuo, más allá de la mera y, a veces, necesaria colaboración formal o burocrática.
–Los orígenes de su empresa se remontan a 1939, ¿cree que la aparición de las cátedras de empresa les ha cambiado? ¿De qué forma?
–Nuestra empresa tiene unas raíces e historia muy sólidas y, lógicamente, las posibilidades de interactuar desde las empresas con el ámbito universitario son hoy muy diferentes a las de 1939. En estos últimos años, creo firmemente que nuestra participación en la Cátedra de Ética Empresarial IECO-UV nos ha ayudado a avanzar en nuestro objetivo de hacer nuestra empresa más humana; más cercana a nuestras personas y a la sociedad.
Raúl Royo
CEO de Royo Group
–¿En qué aspectos ayuda esta cátedra a Royo Group a mejorar como empresa?
–La colaboración con la cátedra surgió por una necesidad interna que no sabíamos bien cómo resolver. La dirección de personas y la actividad económica propia de una empresa son disciplinas complejas que, en función de cómo se manejen, pueden contribuir a obtener grandes resultados. Sin embargo, la frenética actividad del día a día no nos suele dejar espacio para reflexionar sobre la importancia de estas cosas con la intensidad que a veces desearíamos. Por eso pensamos que, para conseguir nuestro objetivo de poner en valor a las personas, a través de los valores que existen en la compañía y que estimulan el compromiso y un sentido de pertenencia a Royo, lo mejor era apoyarnos en una cátedra que nos acompañara en este proceso y nos ayudara a hacerlo mejor.
–¿Cómo considera que Royo Group está contribuyendo a enriquecer la labor de esta cátedra?
–Nuestra experiencia particular en el modelo de dirección de personas basado en los principios del 'humanistic management' hace que podamos enriquecer los contenidos y las investigaciones que la cátedra está desarrollando. Royo colabora con la cátedra en su proyecto de formación de doctorandos y en la realización de tesis doctorales. Compartimos nuestros proyectos de investigación internos sobre nuestras necesidades y la cátedra aporta herramientas que nos ayudan a mejorar como personas y como empresa. Esto hace que mantengamos una comunicación continua y un plan de trabajo que añade conocimiento y valor a las dos partes. Además de utilizar el caso de Royo en las universidades, aportamos ejemplos de casos prácticos y cualquier contenido o iniciativa que la cátedra necesite utilizar para enriquecer sus investigaciones.
–¿Cree que las empresas deberían apoyar el crecimiento de esta clase de cátedras?
–Estoy convencido de que la colaboración universidad-empresa es fundamental. Primero, para acelerar el conocimiento y crecimiento personal de los alumnos, y segundo, para investigar sobre nuevos modelos de 'management' que podríamos aplicar las empresas. Estas cosas son difíciles de gestionar porque no son prioridad en las empresas y se suele ver muy de lejos toda esta faceta de investigación y formación que lleva a cabo desde las universidades. Por ese motivo, una mayor cercanía y una constante relación ayuda a que ese conocimiento fluya de forma acelerada y mejore, de modo muy práctico, los resultados finales.
Vicente Ruiz
Presidente de RNB
–¿Qué aporta la Cátedra Internacional de Ética Empresarial IECO-UV a RNB?
–La cátedra nos ayuda a reflexionar en los principios del 'humanistic management' que fundamentan nuestro modelo de empresa, lo que denominamos nuestra esencia. Actualmente, estamos trabajando conjuntamente -aportamos nuestro granito de arena al desarrollo de una tesis doctoral- en una herramienta que nos ayude a diagnosticar la calidad ética de nuestra cultura organizacional y poder medir si esa esencia de RNB está interiorizada y es compartida y vivida por los trabajadores en los distintos niveles de la organización. Esto nos va a permitir conocer en qué medida puede haber carencias y necesidades específicas y valorar el mejor modo de afrontarlas para hacer que este 'ser RNB' sea perdurable en el tiempo.
–¿Por qué es importante para RNB desarrollar e impulsar este tipo de cátedras?
–Las cátedras de empresa son un instrumento fantástico que la universidad pone al servicio del mundo empresarial para desarrollar actividades y contribuir a sus proyectos de investigación. Me parece muy enriquecedor que RNB pueda formar parte de esa conexión entre el mundo académico y de generación de conocimiento, compartiendo esa realidad más directa y práctica de nuestro día a día. Para RNB el humanismo y la ética empresarial son dos pilares fundamentales que fundamentan su esencia y, por tanto, de suma importancia para nuestro desarrollo como empresa y el desarrollo personal y profesional de nuestros trabajadores. La Cátedra IECO-UV nos da el soporte y la ayuda para contribuir al logro de nuestro propósito.
–¿Por qué cree que no se debe separar el mundo empresarial del universitario?
–Parece obvio que la transferencia del conocimiento que proporciona la universidad es necesaria para la mejora de nuestras empresas, de nuestros trabajadores y de nuestra sociedad. Contribuir a hacer una sociedad mejor no es sólo tarea de unos, es trabajar en equipo, todos juntos, empresa, universidad, administración pública y organizaciones de todos los ámbitos.
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